Oviedo, J. A. ARDURA

Los sindicatos de la función pública son un hervidero. Mientras las centrales perfilan su calendario de movilizaciones, que arrancará mañana con la primera manifestación en Oviedo, y mueven ficha para intentar despejar las dudas de sus miles de afiliados acerca de cómo repercutirá la reducción salarial en los sueldos de los sesenta mil funcionarios y empleados públicos con que cuenta Asturias entre la administración estatal, regional y local, algunos trabajadores, como los enferemeros de Avilés, ya llevaron a cabo protestas ayer.

Los sindicatos sectoriales han intensificado sus contactos en las últimas horas para planficar un calendario de movilizaciones en el que no se ponen de acuerdo con las centrales mayoriarias, UGT y CC OO. De momento, la primera acción programada será la manifestación que partirá mañana, a las seis de la tarde, de la estación de Renfe de Oviedo para concluir frente al parlamento regional. Los sindicatos convocantes son CSIF, USIPA, SICEPA, CSI y SUATEA dado que los mayoritarios se han desmarcado. Y es que tanto UGT como CCOO han apostado por iniciar las medidas de protesta con una concentración frente a la Delegación del Gobierno, que tendrá lugar al día siguiente, el jueves a las seis de la tarde. Ya en el ámbito nacional, las centrales mayoritarias decidieron ayer posponer casi una semana la huelga general en la adminisrtación, señalada finalmente para el próximo ocho de junio cuando estaba prevista para el día dos.

Los sindicatos tienen dividida su actividad entre la planificación de las medidas de protesta en respuesta a los recortes anunciados por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y la atención a los afiliados, que tienen especial interés en saber la repercusión de los recortes en sus salarios. La incertidumbre es general, tanto entre los asesores de los propios sindicatos como entre los trabajadores y hasta en las propias administraciones que deberán aplicar el ajuste, como el Principado o los ayuntamientos. De momento, el desconocimiento sobre las nuevas tablas salariales es general. «Opina todo el mundo sin saber», manifestó Luis Ángel Ardura de la Federación de Servicios Públicos de UGT. El dirigente sindical apuntó que es preciso esperar hasta el próximo jueves, día señalado para que el Gobierno ofrezca los detalles del ajuste en la Mesa General de la Función Pública, que se reunirá en Madrid. «Hasta ese momento, cualquier estimación que se haga es hablar por hablar», afirmó Ardura, quien aseguró que un tercio de los trabajadores del Principado (exceptuando profesores y médicos) «tienen unos ingresos mensuales de entre 800 y 1.500 euros». Por su parte, Juan Gavira, del sindicato CSIF, destacó la gran inquietud existente entre los empleados públicos. «Nadie se cree nada», señaló acerca de las últimas estimaciones hechas públicas que situan el recorte de sueldo entre los 36 y los 226 euros mensuales para los empleados públicos que cobran entre 1.200 y 3.000 euros. «No nos podemos fiar de un Gobierno que en octubre firmó un acuerdo de subida del 0,3 para 2010 y 0,5 para 2001 y que seis meses después de echa atrás».