Gijón, M. CASTRO
Los candidatos de PSOE y PP a la Presidencia del Principado en las elecciones del próximo 22 de mayo escogieron ayer Gijón para mantener sendos contactos con representantes del mundo empresarial. Las ejecutivas de Femetal y del Club de la Innovación hicieron de anfitriones respectivos para Javier Fernández y para Isabel Pérez-Espinosa.
Javier Fernández, que estuvo acompañado en su visita a la sede de la Federación del Metal por el actual consejero de Industria del Principado, Graciano Torre, destacó tras la reunión que considera que el sector del metal está llamado a tener un «papel esencial en el futuro de Asturias» y que durante la charla con los empresarios se abordó el futuro entorno regulatorio para la empresa en general y para este sector, «motor fundamental para tirar de la economía de Asturias».
La ejecutiva de Femetal, presidida por César Figaredo de la Mora, hizo llegar al candidato socialista algunos de sus planteamientos para facilitar la reactivación de la economía asturiana, algo que repetirán en próximos días a dirigentes de otras formaciones, indicaron desde la patronal del metal. Entre ellas destaca la petición de sendas líneas de subvenciones, ligadas a la innovación, para que las empresas del metal adquieran nueva maquinaria y para la formación continua en el sector. Otras de las demandas del sector son el apoyo a la agrupación de empresas en consorcios, el fomento de la incorporación de la mujer al sector y de los jóvenes y la adecuación de los ciclos formativos de FP. También plantearon al candidato varias demandas comunes para el conjunto de la economía, como clarificar el futuro energético, medidas fiscales para fomentar la investigación y desarrollo, la reducción del IAE y del canon de saneamiento.
Pérez Espinosa, por su parte, mantuvo un encuentro en el Parque Científico y Tecnológico de Gijón con la junta directiva del Club Asturiano de la Innovación, tras el que consideró crucial para el desarrollo empresarial la «necesidad de profundizar la relación entre Universidad y empresa, no sólo porque la formación responda realmente a las necesidades del mercado laboral, sino también a la presencia de los empresarios en la Universidad y la intensificación del significado de las prácticas profesionales, que tienen que tener una mayor duración y plantearse durante la formación y no como una finalización de unos estudios, para que el joven que se está formando capte ya lo que es el entorno en el que va a desarrollar su labor profesional y el mercado en el que se va a mover», algo que no sólo debe hacerse con los jóvenes universitarios, sino también con los estudiantes de formación profesional.
Para Pérez Espinosa, universidad y empresa son «dos pilares de la reactivación económica asturiana» que deben estar «en clara sintonía». La candidata del PP destacó: «La innovación y el desarrollo de la innovación es lo que va a marcar las diferencias entre unas empresas y otras, y cuando ahora tenemos como una prioridad y necesidad urgente de la creación de empleo, y tenemos claro que quienes crean empleo son las empresas, lo que tenemos que hacer es una administración que facilite todas las necesidades y el marco en el que se desarrollen, se consoliden y se creen nuevas empresas», apostando por la innovación.
La candidata del PP criticó la política del actual Gobierno autonómico al respecto, por considerarla inconcreta. Pérez-Espinosa también consideró que la innovación está ligada a la internacionalización y respecto a esto último, cuestionó el papel que juega la oficina del Principado en Bruselas. «No tiene que funcionar como un centro de representación institucional o ser un centro asturiano, sino ser realmente el representante de las empresas allí, que facilite la búsqueda de financiación», como hacen otras comunidades.
Las declaraciones del lunes en Oviedo de Pérez-Espinosa, en las que abogaba por superar los localismos para sacar a Asturias de la «marginalidad política» encontraron ayer respuesta en el candidato socialista, Javier Fernández. El líder socialista, tras su visita a las obras de la planta experimental de captura de CO2 en La Pereda (Mieres) expresó su sensación de que estas declaraciones sean «una estrategia para dejar atrás la historia reciente de confrontación desde Oviedo con el conjunto de localidades de la zona central de Asturias».
