Oviedo, L. Á. VEGA

Los deberes que los agentes sociales ponen al nuevo Gobierno de Francisco Álvarez-Cascos se resumen en pocas palabras: establecer las bases para el mayor consenso posible, profundizar en los estímulos económicos y mantener la protección social para las víctimas presentes y futuras de la crisis. Los empresarios ponen énfasis en la necesidad de concluir las infraestructuras pendientes y facilitar al sector medios de financiación suficientes para no ahogarse, sobre todo ante los incumplimientos de administraciones como la municipal. Los sindicatos exigen el cumplimiento de los acuerdos ya alcanzados con el anterior Gobierno para el fomento del empleo y la competitividad, y ponen especial énfasis en el mantenimiento de los servicios públicos y los sectores industrial y energético.

l Talante. Para el presidente de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), Severino García Vigón, antes de hablar de cualquier prioridad, «lo deseable es que Álvarez-Cascos pueda llevar a cabo su programa de Gobierno», para lo que necesita «una gran capacidad de concitar apoyos y consensos». También el secretario general de UGT-Asturias, Justo Rodríguez Braga, llamó la atención sobre la necesidad de que cualquier medida que adopte el nuevo Gobierno «esté sustentada en la mayoría del Parlamento y se arrope con la concertación». Para Rodríguez Braga, «en una crisis como la actual, es imprescindible buscar apoyos». De lo contrario, añadió, «va a ser muy difícil que el Gobierno salga adelante».

También el secretario general de CC OO en Asturias, Antonio Pino, incidió en la necesidad de los consensos y llamó a iniciar de inmediato el diálogo social, con el fin de rematar el acuerdo para la competitividad, el empleo y el bienestar de Asturias (ACEBA). «Lo que conocemos por los discursos de Cascos se desajusta respecto al modelo que hemos seguido», sentenció.

l Estímulos a la actividad económica. Los agentes sociales coinciden en la necesidad de que el Gobierno regional apoye la recuperación económica, aunque hay matices. La primera oportunidad para ver la capacidad de reunir apoyos del Gobierno de Cascos serán los Presupuestos, en los que deben incluirse «estímulos capaces de generar un crecimiento de la economía», aseveró Severino García Vigón. El presidente de los empresarios considera que «el desempleo es tan sólo un síntoma de la situación económica, no hay fórmula posible para reducirlo salvo el estímulo de la actividad económica y de la competitividad». Vigón indicó que «los empresarios están teniendo grandes dificultades de acceso al crédito», por lo que es imprescindible potenciar instrumentos como la Sociedad de Garantía Recíproca de Asturias (Asturgar) y las ayudas a la financiación empresarial.

No se olvidó de la internacionalización de la empresa asturiana. «Nuestro mercado es reducido y debemos aprovechar todos los instrumentos, como la Sociedad de Promoción Exterior (Asturex), que ha dado frutos y debe potenciarse», indicó. La mayor preocupación de los empresarios asturianos está, sin embargo, de este lado de las fronteras, y es la financiación municipal, puesto que «las empresas tienen que soportar retrasos en los pagos, que en algunos casos las están poniendo en riesgo de cierre», añadió.

Los sindicatos también coinciden en la necesidad de estimular la economía asturiana, pero para ello consideran que deben cumplirse los acuerdos alcanzados con el Gobierno anterior. «Es fundamental que se cumplan las inversiones que ya tenemos pactadas para los Presupuestos de 2011. Precisamos un plan de choque para combatir el desempleo juvenil, que ya llega al 48% y es completamente inasumible», indicó Justo Rodríguez Braga.

Para el secretario de UGT-Asturias, «la economía asturiana debe sustentarse sobre dos pilares, como son la industria y la energía». Son los que tiran del resto de los servicios en una región que no puede fiar su desarrollo al sector turístico, en opinión del secretario general. Por tanto, «hay que atender, desarrollar y apoyar la industria y el sector energético», subrayó.

Antonio Pino se centró especialmente en la exigencia de cumplir el acuerdo económico y social alcanzado con el ex presidente Álvarez Areces en 2008. «Hay elementos que tenemos aún que desarrollar. Hay pendientes 500 millones de inversión pública por ejecutar para el estímulo del empleo e instrumentos de protección social», indicó. Para Pino, es prioritario «agilizar el abono del salario social a las 34.000 personas que no reciben salario alguno».

El pacto de concertación también contempla 2.300 millones de euros para el estímulo de actividad productiva y la mejora de la formación y el empleo. Según Pino, deben aplicarse los planes para convertir los contratos temporales en indefinidos, así como el fomento de la contratación temporal de jóvenes. «Es fundamental que se cree empleo en el sector industrial, fortalecerlo, aumentar la inversión en I+D+i y no descuidar la exportación», añadió.

El rector de la Universidad de Oviedo, Vicente Gotor, por su parte, opinó que «se hace imprescindible crear nuevas empresas y un impulso de la innovación, y ahí puede entrar la Universidad».

l Política fiscal. El secretario general de CC OO, Antonio Pino, se opuso frontalmente a reducir los impuestos. «Para hacer las políticas hacen falta recursos», indicó. Por eso, y estando en contra de medidas como el céntimo sanitario, Pino rechazó la anunciada reducción de tasas del Principado, «que supondrá 310 millones menos de ingresos», en un momento de pérdida de fondos estructurales. «No estamos de acuerdo con una política fiscal restrictiva, sino con una progresiva y progresista, que grave más a las rentas más altas», indicó Pino.

l Infraestructuras. Severino García Vigón estima imprescindible concluir las infraestructuras pendientes, las que están en ejecución y las ya terminadas. «El Hospital Central, el Niemeyer, el Calatrava, el Musel..., son infraestructuras que se hacen para algo y hay que ponerlas en funcionamiento. Como prioridad debe potenciarse la zona logística de la ZALIA», añadió Vigón.

l Servicios públicos. Para Justo Rodríguez Braga, «hay que reforzarlos, puesto que tienen una proyección de atención y garantía de calidad fundamental». El secretario general de UGT-Asturias indicó que no sólo hay que centrarse en la sanidad y la educación, sino en campos como el transporte, donde Álvarez-Cascos debe dar un impulso importante. Por su parte, el rector de la Universidad de Oviedo, Vicente Gotor, tras indicar que la plantilla de la Universidad «no está dimensionada», opinó que «hay que ser racional» en lo que se refiere al número y distribución de funcionarios. Antonio Pino también reclamó atención para la educación y la sanidad, pero mostró cierta preocupación por la intención del Gobierno de Álvarez-Cascos de privatizar empresas mixtas como Sedes, y menos con el argumento de que altera el funcionamiento del mercado. «Es un planteamiento profundamente liberal y de derechas», afeó el secretario general de CC OO en Asturias.

l Universidad. El rector de la Universidad de Oviedo, Vicente Gotor, ya indicó hace unos días que solicitará del Gobierno que se trasladen los estudios de Ciencias de la Salud junto al nuevo Hospital Universitario Central. Pero también tiene otras peticiones. Por ejemplo, «que nos cubran el cien por ciento de las nóminas del profesorado, que ahora se hace al 91%, que Asturias tenga una plantilla de investigadores, como otras comunidades autónomas, y que creen institutos en torno a ellos».

«No se reduce el desempleo sin estimular la actividad económica y la competitividad»

<Severino García Vigón >

Presidente de FADE

«Se hace imprescindible un impulso a la innovación, y ahí puede entrar la Universidad»

<Vicente Gotor >

Rector de la Universidad de Oviedo

«Precisamos un plan de choque para combatir el paro juvenil, que ya es inasumible»

<Justo Rodríguez Braga >

Secretario de UGT-Asturias

«Hay aspectos del acuerdo económico y social que tenemos aún sin desarrollar»

<Antonio Pino >

Secretario de CC OO en Asturias