La relación entre Francisco Álvarez-Cascos y los perros sigue extraños vericuetos a través de los tiempos. El PSOE decía de él que era el dóberman del Gobierno y un conocidísimo y atirantado periodista provocó su ira por retratarle como Milú el de Tintín (Aznar en el papel de Tintín). Y ahora resulta que el mismo Cascos se ha comparado con Beethoven, que debe ser ese adorable San Bernardo que protagoniza una serie de seis películas. La primera de ellas, de 1992, se titula «Beethoven» a secas y las siguientes: «Beethoven 2: La familia crece», «Beethoven 3: De excursión con la familia», «Beethoven 4: Enredo en la familia», «Beethoven 5: el perro buscatesoros» y «Beethoven 6: Estrella de Hollywood». Seis películas imprescindibles para desentrañar, acaso, toda una biografía política.