Oviedo,

L. Á. VEGA / F. VALLINA

El candidato del PSOE a la Presidencia del Principado, Javier Fernández, considera «irresponsable» que el Ejecutivo regional proponga el trámite de una ley que le permita endeudarse en 486,5 millones de euros, con la Junta General disuelta y las elecciones autonómicas a la vuelta de la esquina, aunque asegura que su partido mantendrá una postura «constructiva» si los informes legales legitiman la potestad legislativa de la Diputación Permanente, el órgano encargado de dar continuidad a la labor parlamentaria mientras la Cámara se encuentra fuera del período de sesiones, como es el caso. «No obstante, la situación vuelve a incidir y reforzar la idea de irresponsabilidad del Gobierno y de Cascos», insistió Fernández.

El Gobierno regional asegura que la aprobación del proyecto de ley es esencial para conseguir la financiación que garantice las inversiones de carácter plurianual previstas en el Presupuesto prorrogado de 2011, que en caso contrario «tendrán que paralizarse por completo» al no estar amparadas por ley, según señaló el consejero de Hacienda, Ramón del Riego. «Esta circunstancia tuvo que haberse previsto y haberse propuesto antes de disolver la Junta General con motivo del adelanto electoral o simplemente no haber disuelto la Cámara», criticó Javier Fernández.

Por su parte, el presidente del Principado, Francisco Álvarez-Cascos, aseguró ayer que no entiende «las críticas» de los diferentes partidos porque «todos saben» que la prórroga presupuestaria «no incluye el recurso a la deuda del ejercicio pasado». Cascos tiene claro que «quien se oponga a esta iniciativa» estará «defendiendo a sabiendas el colapso de la economía asturiana», y afirma que el Ejecutivo tuvo que tomar esta medida de forma «obligada y urgente», algo que tendría que haber hecho «con o sin elecciones», dado el escenario de prórroga presupuestaria, «motivada por el rechazo a las cuentas de Foro de PP y PSOE».

«Si nosotros no llevásemos la proposición de ley a la Junta, estaríamos provocando el colapso presupuestario, porque se prorrogaría todo salvo la partida de ingresos vía endeudamiento», explicó Cascos. El objetivo del Gobierno, según el presidente autonómico, «es atender las obligaciones de carácter inversor que han sido heredadas». Francisco Álvarez-Cascos considera que «la oposición del PSOE» a la medida -el PP aún no se ha pronunciado- constituiría «la prueba del nueve del cinismo y la hipocresía que se esconde detrás de la devolución del presupuesto de Foro». Según Cascos, «estarían (incluyó al PP) castigando a la sociedad asturiana introduciendo un grave escenario de recesión».

El coordinador regional de IU, Jesús Iglesias, cree que la iniciativa del Gobierno de Foro es «el arranque de la campaña electoral» y «un nuevo paso en la estrategia de confrontación del Ejecutivo con el legislativo». Iglesias sostiene que un Gobierno con un presupuesto prorrogado tiene dos opciones: «Convocar elecciones o seguir gobernando y buscar cómo desarrollar ese presupuesto». No obstante, aseguró, «lo que no tiene sentido es pretender hacer las dos cosas».

El candidato del PSOE a la Presidencia del Principado, Javier Fernández, quiso mostrarse ayer «respetuoso» con la organización interna del resto de partidos, pero no se mordió la lengua a la hora de valorar las listas electorales de Foro y PP: «Están la opción de Cascos y la de la presidenta del club de fans de Cascos -en referencia a Mercedes Fernández, la candidata popular-, que no se atrevió ni a valorar los seis meses de Gobierno de Foro». Fernández considera que las listas evidencian «un acercamiento» entre ambos partidos: «Sólo hay que ver que no se lanzan acusaciones entre ellos, sólo algún que otro pellizco de monja», subrayó.

El candidato del PSOE mantiene que si el PP hubiese presentado la misma lista en las elecciones del pasado 22 de mayo «las derechas ya se hubiesen arreglado antes». «No sé si va a tratarse de una unión temporal política o si volverán a la bronca para volver a colocar a Asturias al borde del precipicio», concluyó Javier Fernández.