Oviedo, José A. ORDÓÑEZ

Francisco Álvarez-Cascos negoció, directa o indirectamente, con otras cajas de ahorros, además de Cajastur, la venta de exposiciones de arte organizadas por empresas vinculadas a su actual esposa, María Porto, y en las que él mismo participaba. Una de estas firmas, Aqualium Spain, logró el patrocinio de la Obra Social de la Caixa para organizar en Vigo, en el año 2006, una muestra escultórica del polaco Igor Mitoraj, que previamente había pasado por Granada, Palencia y Palma de Mallorca y que después iba a viajar a Sevilla, Madrid y Barcelona. De las treinta y una exposiciones que figuran en la web de Aqualium, veinticinco fueron patrocinadas por cajas de ahorros españolas.

Un año antes de la muestra de Mitoraj en Vigo, en 2005, Aqualium Spain, firma de Porto y en la que entonces también estaba el hoy presidente en funciones del Principado, había contratado con Cajastur la exposición «Las meninas», de Manolo Valdés, para el paseo de los Álamos de Oviedo. Ese mismo año, Marlborough, la galería de arte en la que trabajaba Porto, vendió a la entidad asturiana tres esculturas de asturcones de bronce, también de Valdés.

Álvarez-Cascos y Porto asistieron personalmente a Vigo para la puesta de largo de la exposición «El mito perdido» de Igor Mitoraj, integrada por veintidós obras en bronce, de gran tamaño, diseminadas por diversos puntos de la ciudad. La muestra, que al año siguiente se iba a llevar a La Coruña, no fue patrocinada por las cajas gallegas Caixa Galicia y Caixanova, sino por la Caixa. En nombre de la entidad catalana intervino en la inauguración Juan Cejudo, director de su Obra Cultural. La alcaldesa de Vigo en aquel momento era la popular Corina Porro.

Junto a esta muestra escultórica, otro artista representado por María Porto, el pintor gallego Alejandro Corujeida, expuso en Vigo en 2006. La muestra se pudo contemplar en el Centro Social de Caixanova, que entonces aparecía como firma patrocinadora. Ahora, asegura que se limitó a ceder la sala de exposiciones y que no adquirió obras de este artista.

En Asturias, la empresa Aqualium Spain percibió casi 100.000 euros de Cajastur por la exposición «Las meninas», de Manolo Valdés, que estuvo en el paseo de los Álamos de Oviedo en 2005. En el contexto de aquella muestra nació otra operación con obras del mismo artista, la compra de tres caballos asturcones en bronce por 1,2 millones de euros más IVA. En este caso, Cajastur no formalizó el contrato con Aqualium, sino con la galería Marlborough, también vinculada a la esposa del ex ministro de Fomento y representante del escultor. El pago de los asturcones, adquiridos con motivo del 125.º aniversario de Cajastur, se fraccionó en dos anualidades. En 2005 la entidad abonó a Marlborough 500.000 euros más IVA y en 2006 pagó los restantes 700.000 euros más IVA. Las tres piezas tuvieron un precio de 750.000 euros, a razón de 250.000 euros cada asturcón, a lo que hay que sumar otros 350.000 euros por los tres moldes en madera.

Francisco Álvarez-Cascos, al frente del Ministerio de Fomento, habría invertido más de tres millones de euros de dinero público en la compra de obras de arte a empresas vinculadas con María Porto, según diversas informaciones publicadas el pasado año. El diputado nacional del PSOE Antonio Trevín ha realizado varias preguntas por escrito al Gobierno en las que pide que se le detallen los negocios que hizo Cascos en su etapa al frente del Ministerio de Fomento con su entonces novia y actual esposa. En estas iniciativas, el ex delegado en Asturias del Gobierno de Zapatero hace referencia a informaciones sobre unas adjudicaciones que habrían alcanzado los 748.597,60 euros, realizadas entre el 1 de mayo de 2003 y el 15 de marzo de 2004. El parlamentario asturiano también quiere saber si las firmas de María Porto eran las proveedoras habituales de Fomento en tiempos del hoy presidente en funciones del Principado, quien elegía las obras adquiridas por el Ministerio, y si Cascos tenía conocimiento de las compras.

También se interesa Trevín por el retrato de Álvarez-Cascos para la galería pictórica con retratos de los ministros de Fomento. La obra fue encargada al manchego Antonio López, un pintor vinculado con Marlborough, la empresa en la que trabajaba María Porto. El diputado explicó ayer a LA NUEVA ESPAÑA que Fomento tiene de plazo hasta comienzos de mayo para contestarle por escrito. De no ser así, la ministra Ana Pastor debería de facilitarle la información solicitada en la primera reunión que celebre la Comisión de Fomento.

Según ha transcendido, Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) contrató en 2003 el 59 por ciento de su presupuesto cultural (126.356 euros) con la galería Marlborough y la firma International Public Art, ambas vinculadas a Porto. En 2004 la cifra ascendería a 1.028.000 euros. International Public Art se hizo también con un contrato de Renfe de 1.140.000 euros, en 2004, para instalar un conjunto escultórico en la estación de Atocha, en Madrid. Según estas informaciones, la galería Marlborough también lograría contratos por valor de 2,4 millones con la Dirección General de Carreteras mientras Cascos estaba al frente de Fomento. El mismo Ministerio habría contratado directamente con la galería vinculada a Porto, al igual que hizo Correos. Fueron dos contratos que sumaban 195.891 euros.