Oviedo, P. GALLEGO

«Sin circunscripción nadie se acordará de nosotros». Es lo que opinan representantes de varias asociaciones del occidente y del oriente de Asturias que se oponen a la petición de UPyD de que Asturias, en lugar de tres, tenga sólo una circunscripción electoral, idea incluida en el documento que recoge las exigencias del partido de Rosa Díez para apoyar al próximo Gobierno del Principado. Según explican los portavoces de estas asociaciones, la pérdida de las circunscripciones relegaría al occidente y al oriente de la región respecto a la fuerza del área central, justo lo contrario de lo que se buscaba al implantar las circunscripciones, lo que haría que las alas del Principado perdiesen «peso» en los comicios.

«Los que vivimos y trabajamos en el Occidente debemos pronunciarnos alto y claro en contra de que se suprima la circunscripción», afirman. Las consecuencias que la eliminación de las circunscripciones tendrían sobre estos territorios causan «preocupación», afirma el presidente del Consorcio para el Desarrollo Rural del Oriente de Asturias, Ramón Galán Escandón.

En el Occidente, la plataforma la componen siete asociaciones: tres de Navia -la Unión de Estudiantes (UDE), la agrupación vecinal «San Miguel», de Anleo y la asociación juvenil-, dos de Valdés -Mayores Valle del Este (Trevías), y Autónomos y Mujeres Progresistas-, y otras dos de Cangas del Narcea, la asociación juvenil de Amigos de la Radio y Mujeres Campesinas. Varias de ellas están vinculadas al Partido Socialista. Según sus portavoces, algo que también sostiene Ramón Galán, la realidad de las comarcas del Occidente y del Oriente, en Asturias, sería «distinta de no haber habido una circunscripción».

«En su día», explica el presidente del Consorcio para el Desarrollo Rural, «cuando hubo un consenso político y social para darnos este tipo de representación, todo el mundo entendió que en Asturias, por su singularidad geográfica, orográfica, económica y social, era imprescindible para un desarrollo justo y equilibrado dar representación política a las alas», afirma Galán. El objetivo, «que la mayor población del centro no ejerciera un peso total sobre las decisiones que afectaría a las poblaciones más rurales», continúa, «donde se concentran los valores medioambientales más relevantes».

Hasta la fecha, afirman, «este sistema ha conseguido equilibrar el desajuste entre lo urbano y lo rural». «La experiencia de estos treinta años de autonomía es que pasamos de carecer de todo, desde carreteras y caminos hasta abastecimiento de agua y saneamiento o electrificación, a disponer de buenos equipamientos sanitarios», sentencian. A los hospitales de Jarrio y Cangas del Narcea en el Occidente se suman centros desde Educación Infantil a Bachiller, polígonos industriales e infraestructuras. Equipamientos que, afirman, empeorarían sin la circunscripción. «Todo esto no ha sido por casualidad, tiene que ver con políticas de cohesión», añaden. «Nos es imposible aceptar este tipo de planteamientos», añade Galán, «y lo trasladaremos a todos los grupos políticos».