Oviedo, José A. ORDÓÑEZ
El Gobierno de Cataluña (CiU) critica el que considera excesivo buen trato de los Presupuestos Generales del Estado al desarrollo de algunas líneas de AVE, entre ellas las de Asturias y Galicia, frente a las escasas inversiones que aprecia en su comunidad autónoma. Para cambiar la situación, el Ejecutivo de Mas advierte de que tratará de cambiar la distribución de la inversión prevista por Ana Pastor. «Hay cosas que claman al cielo. La Alta Velocidad a Galicia, Extremadura, Asturias y el País Vasco se queda con la mayoría de los fondos, un 70%, mientras que Rodalies (las cercanías ferroviarias catalanas) recibe un 0,5% y el ferrocarril convencional un 6,2%», subrayó el consejero de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat, Lluis Recoder, quien, de paso, anunció que CiU tratará de modificar las cuentas estatales durante su trámite parlamentario en el Congreso. «Queremos evitar el enfrentamiento, pero está claro que no nos vamos a quedar de brazos cruzados», advirtió el consejero de Artur Mas.
Las críticas de Recoder han sido compartidas por el alcalde de Barcelona, el también convergente Xavier Trías, aunque en su caso, se centró en el AVE gallego, cuya utilidad económica puso en duda. El regidor, en línea con Recoder, se mostró partidario de hacer un frente común con los grupos políticos del Consistorio para hacer presión en favor de un nuevo reparto de los fondos de infraestructuras, sobre todo de las ferroviarias, con el objetivo de que beneficien a Barcelona y a Cataluña.
El AVE de Asturias tiene consignados en los Presupuestos 419 millones de euros. 210,5 corresponden a la partida correspondiente a la variante ferroviaria de Pajares, que, según las previsiones, abrirá al tráfico en 2014, tras diez años de obra y cinco de retraso sobre el primer calendario. Los otros 208,5 millones son para avanzar en el tramo que va de Palencia a León, que también acumula una notable demora y no estará hasta 2014. En esta situación, el viaje en tren a Madrid desde Asturias no bajará de las cinco horas, al menos, hasta dentro de dos años. La llegada de la Alta Velocidad a las grandes ciudades de la región no tiene ni fecha.
Por lo que concierne al AVE gallego, que marcha más retrasado que el asturiano, la previsión económica en los Presupuestos Generales del Estado es de unos 700 millones. El compromiso inversor de José Blanco en los meses finales del Gobierno socialista ha tenido continuidad con el PP.
Ante las críticas catalanas, Ana Pastor, ha reiterado su compromiso con el desarrollo de las líneas de AVE del Noroeste, a las que considera una «absoluta prioridad». En el caso de la comunidad autónoma vecina, aseguró en relación a la inversión en materia de Alta Velocidad: «Es por solidaridad interterritorial, porque Galicia lo necesita, y es una prioridad porque está en el noroeste de España y lo necesita para ser competitiva, para que todos los ciudadanos gallegos puedan colocarse en otros lugares de España en un tiempo razonable».
En declaraciones a LA NUEVA ESPAÑA, Ana Pastor también aseguró hace unos meses que la Alta Velocidad de Asturias es una «obra prioritaria» y que, en ese sentido, había dado «instrucciones para desbloquear de forma inmediata» todo lo que falta para terminar los túneles de la variante de Pajares. «Soy del Norte y creo que la España del AVE era un tanto asimétrica. Tanto el AVE gallego como el asturiano son muy importantes por la propia ubicación de estas comunidades», añadió la titular de Fomento, quien, según indicó, ha viajado muchas veces a Asturias en tren y conoce bien las carencias del trazado.
