Oviedo, Eloy MÉNDEZ

El Principado está dispuesto a congelar las tasas universitarias de primera matrícula con vistas al próximo curso, aunque aún no ha tomado una decisión definitiva, a la espera de que los responsables del Ejecutivo regional mantengan un nuevo encuentro con el rector, Vicente Gotor. No obstante, la consejera de Educación y Cultura, Ana González, deberá fijar su postura al respecto antes del mes de julio, la fecha límite que ayer estableció el ministro José Ignacio Wert para que todas las autonomías determinen el precio exacto de los estudios de educación superior.

El Ministro hizo este anuncio a los diferentes consejeros durante la Conferencia General de Política Universitaria, celebrada en Madrid, para debatir sobre algunos de los puntos polémicos del decreto ley de medidas urgentes de racionalización del gasto público en el ámbito educativo, como el precio de las tasas universitarias o el aumento de la nota media del expediente para acceder a una beca. «Hay un plazo de sentido común. Los precios deberían ser razonablemente conocidos en el mes de julio», indicó Wert, ante el inminente inicio de la matriculación en las diferentes titulaciones, una vez que se ha completado la primera convocatoria de las pruebas de acceso a la educación superior (PAU) en casi todas las comunidades.

Tras el encuentro, la Consejería de Educación y Cultura hizo público un comunicado en el que «ratifica su intención de no subir las tasas universitarias en primera matrícula». No obstante, reconoce que estudiará «una posible subida respecto a las sucesivas matriculaciones», que penalizan a los que repiten alguna asignatura. En esa misma nota, el Ejecutivo regional también señala que intentará mantener los precios «en la franja más baja de la horquilla prevista por el decreto», que obliga a que los estudiantes asuman entre el 15 y el 25 por ciento de lo que cuesta su formación.

La falta de definición del Principado contrasta con los anuncios realizados ayer por muchos otros gobiernos autonómicos, que ya han tomado una decisión en torno a los precios de sus respectivos estudios universitarios. No obstante, las únicas regiones que han delimitado cuantitativamente las tasas son Castilla y León y Castilla-La Mancha. En el primer caso, subirán hasta 400 euros, lo que permitirá recaudar unos trece millones de euros. En el segundo, se baraja un incremento máximo de 185 euros.

Por su parte, Cataluña tiene previsto llegar hasta el máximo permitido, de un 25 por ciento, aunque habrá excepciones para las familias con menos ingresos. En el caso de Aragón, Andalucía y País Vasco, la subida de tasas será igual al IPC. Galicia y Extremadura ejecutarán cambios «mínimos», mientras que Murcia realizará una revisión al alza «menor a la media nacional».