Tapia de Casariego,

T. CASCUDO

Taramundi es, sin lugar a dudas, la casa del agua. No sólo por los cauces que surcan todo el concejo, sino por su importancia vinculada a los ingenios hidráulicos que plagan los pueblos y caseríos de la zona. Hay puntos de visita obligada como Teixóis o Mazonovo y la mejor manera de conocerlos es a pie. Por ello la Ruta del Agua (PR AS-17) es el itinerario perfecto.

La ruta parte de la zona baja de la capital taramundesa, en el entorno del yacimiento de Os Castros (que también merece un visita, pues dispone de unas pasarelas de madera para conocer la zona excavada). Allí el camino conduce hasta Mazonovo, donde se localiza el Museo de los Molinos (la entrada cuesta 3,90 euros para adultos), donde se pueden visitar varios ingenios que aprovechan la fuerza del agua del río Cabreira.

El camino continúa en pendiente ascendente hasta el caserío de la Granda, que adentra al visitante en un bosque autóctono de castaños y alisos. En esta zona existe la posibilidad de desviarse para visitar una pequeña cascada o continuar la ruta hasta el pueblo de Esquíos, núcleo habitado durante años por ferreiros y artesanos del cuchillo. Precisamente en esta localidad se puede visitar el Museo Etnográfico de Esquíos (información en el 985979640), una recopilación de más de un millar de antiguas piezas que antaño formaban parte de la vida tradicional. Además, es posible visitar un taller de navajas y cuchillos.

En Esquíos la ruta se bifurca y se puede optar por la opción más larga, que conduce hasta el pueblo de Veigas y luego lleva a Teixóis, o acortar el camino y tomar el acceso más rápido y directo a Teixóis. El complejo etnográfico de Os Teixóis es uno de los más atractivos de Asturias -desde 2005 está catalogado como bien de interés cultural-, ya que incluye un sinfín de ingenios hidráulicos: mazo, molino, batán, rueda de alfilar y hasta una pequeña central eléctrica.

La visita a este espacio permite sumergirse en el pasado, conocer cómo los vecinos utilizaban la fuerza del agua para las labores de la vida cotidiana y también descubrir la vida tradicional, ya que se conserva intacto el caserío. La visita guiada cuesta 2,5 euros para los adultos y abre todo el año, a excepción del período entre el 20 de diciembre y el 20 de enero. En Teixóis hay una taberna que ofrece comida tradicional y un merendero, por lo que es un lugar ideal para comer y descansar antes de emprender el camino de regreso.

El camino de vuelta, tras unas cuatro horas de caminata por el corazón de Taramundi, se realiza por el mismo camino hasta la capital taramundesa.