Ignacio Prendes Prendes, diputado del grupo de un solo hombre Unión Progreso y Democracia (UPyD), necesitaría ser más Prendes o desprenderse de algunas tareas parlamentarias porque ni con seis asesores da abasto a lo que es presencial. Ayer, sin ir más lejos, llegó veintiún minutos tarde a la Comisión de Presidencia, a las 09.21 horas, cargado de carpetas, mientras Guillermo Martínez Suárez, el consejero de Presidencia, hablaba del buen gobierno en general, no del gobierno concreto, vaya. Cuando llegó el turno de preguntas para Prendes, dijo que no había preguntas y, cuando estaban hablando los demás grupos, le sonó el teléfono móvil y salió. Mientras hablaba fuera llegó el turno de fijación de posición y UPyD no estaba. Claro, no paraba, ¡cómo iba a fijar nada! Cuando entró, en Izquierda Unida le hicieron el gesto de «se te pasó el turno porque estabas fuera» y él encogió los hombros y alzó las cejas para indicar: «¿Qué le voy a hacer?». Tan ocupado estaba que se fue de la Comisión de Presidencia antes de que acabara porque tenía que llegar a la Junta de Portavoces, como Cristina Coto de la Mata, que ahora es responsable de comisiones de Foro Asturias Ciudadanos (FAC). No llegó tarde a la última reunión, la comisión de investigación del «caso Marea», por dos razones: la primera, porque es el presidente de la misma, y la segunda, porque no tenía fijada hora y debía empezar cuando terminara la Junta de Portavoces.