Los funcionarios de prisiones preparan movilizaciones para mediados del mes de septiembre, para protestar por lo que consideran un intento de privatización de la gestión carcelaria. Según señalan los sindicatos convocantes, CC OO y CSIF, la contratación de seguridad privada para el perímetro de 21 prisiones españolas sería el primer paso de esa privatización. Los sindicatos indican, además que, una vez pasados los nueve meses de prueba de las empresas de seguridad, el sistema se universalizará y se aplicará a prisiones excluidas por ahora del programa, como el centro penitenciario de Villabona. Los funcionarios están convencidos de que los vigilantes privados terminarán haciéndose cargo de la seguridad interior de las cárceles. A este problema se une el envejecimiento de las plantillas, puesto que no se están convocando plazas para cubrir las jubilaciones.

«Tratamos de detener un proceso de privatización que el Ministerio viene negando pero al que nos dirigimos de forma inexorable. Las movilizaciones, que serán a mediados de septiembre, tratan de detener además el decaimiento de la institución con el envejecimiento de las plantillas por falta de oferta pública de empleo, y también intentan reivindicar la dignificación profesional, en un momento en que se nos está tratando de desprestigiar», indica Chema López, de la sección sindical de CC OO en la prisión de Villabona.

El primer paso para esa privatización es la contratación de vigilantes privados para la seguridad perimetral de las cárceles, que hasta ahora corría a cargo de la Guardia Civil. «Se está implantando en 21 prisiones, entre las que no se cuenta Villabona. Pero mucho nos tememos que una vez pasado el período de prueba de nueve meses, es decir, el año que viene, se termine estableciendo en todas las cárceles, incluida la asturiana», asegura López. Además, se terminará extendiendo al interior de la cárcel. «Los temarios de formación que se están impartiendo a los vigilantes incluyen aspectos de seguridad interior», indica este representante sindical. Para los sindicatos, esta medida supone una importante merma en la seguridad que pone en riesgo a los funcionarios.

Para CC OO, «hay un factor ideológico en este Gobierno, que prima las privatizaciones, cuando en realidad no supone un ahorro presupuestario. Hay una ofensiva contra los servicios públicos, sin olvidar la cercanía de relaciones entre el Ministerio de Interior y determinadas empresas de seguridad privada beneficiadas con estos contratos». Chema López llamó además la atención sobre el hecho de que se estén solapando vigilantes privados y guardias civiles en las cárceles en las que se está implantando este sistema.

A las movilizaciones previstas no se ha sumado la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip), aunque según manifestó su representante en Villabona, Joaquín Alonso, esta asociación profesional está en contra de la seguridad privada. «En caso de que se produzca un incidente, ¿actuarán los vigilantes o se llamará a la Guardia Civil?», se pregunta Alonso. «Es un absurdo. Supone un gasto que se podría utilizar en otros asuntos, como la convocatoria de plazas para cubrir las vacantes. No sé si es el primer paso para la privatización. Aunque el secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Yuste, haya indicado que no va a afectar a los funcionarios, no le vemos sentido», añade. La edad media de los funcionarios de prisiones es de 51 años, por lo que reclaman un rejuvenecimiento de las plantillas.

Los guardias civiles también se vienen oponiendo a la medida desde que se anunció el año pasado. UniónGC, por ejemplo, mostró su rechazo a esta medida que deja en la incertidumbre a los guardias destinados en las cárceles. Temen que sean destinados a puestos peores, lejos de Asturias, y que estos traslados lleven aparejada una reducción de sueldo. Desde la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias se viene indicando que el sistema de vigilancia privada no se ampliará a más prisiones y que estos profesionales no estarán encargados de la seguridad interior de las mismas.