El Juzgado de instrucción número 4 de Oviedo emitió ayer un fallo en el que absolvió de la falta de lesiones por imprudencia que se le imputaba a un conductor acusado de atropellar a trece personas en el Rally "Príncipe de Asturias" del año 2012.

La magistrada María Luisa Llaneza García afirma en la sentencia que los hechos no son constitutivos de dicha falta "por cuanto no concurren los elementos integrantes de tipo penal". La juez explica que al tratarse de una prueba deportiva, "no existe la limitación de velocidad ni rigen las normas en materia de tráfico contenidas en el Reglamento General de Circulación, no habiendo incurrido dicho conductor en infracción penal". La defensa de alguna de las víctimas anunció que continuará el proceso por la vía civil.