El Vaticano ha enviado una carta animando al Arzobispo de Oviedo a "dialogar" con Jesús María Menéndez, más conocido como el padre Chus. Así lo confirmó ayer su abogado, Viliulfo Díaz. El escrito llegó hace unas semanas y fue el obispo auxiliar, Juan Antonio Menéndez, el encargado de entregársela al implicado. En la carta se indica que se prorrogan las actuaciones y que el recurso presentado por el sacerdote, suspendido de sus funciones de manera cautelar, contra el Arzobispado por su expulsión, sigue adelante. Pero, al final de la carta del Vaticano aparece una frase premonitoria. La Santa Sede indica en el texto su apuesta por que "las partes acerquen sus posturas" de buena voluntad.

Al recibir el documento, el letrado de Jesús María Menéndez llamó el pasado lunes al obispo auxiliar para recordarle la frase final y pedirle que recibiera a su cliente. Menéndez le respondió que no tenía nada que decir sobre el tema y que se atenía a lo que decía la ley. Pero el letrado insistió y le solicitó una recepción con el Arzobispo, Jesús Sanz. Todavía sigue esperando la respuesta.

"Estamos a la espera de que ellos quieran recibirnos y decidan hablar. Esto no tiene nada que ver con el proceso civil, es un tema canónico. Chus lleva un año con esto. Creo que ya ha penado bastante", señaló Díaz.

En el mes de mayo, el Juzgado número 1 de lo Social de Gijón declaró improcedente el despido al padre Chus, que le alejó de sus clases de religión en los institutos Jimena y Jovellanos de Gijón. La Iglesia había alegado que el padre Chus había tenido "actitudes impropias" de su cargo como párroco. La consejería de Educación del Principado de Asturias, Ana González, decidió readmitir a Menéndez para cumplir la sentencia.