La diputada regional de Foro María del Mar García Poo ha reprochado hoy al Gobierno autonómico "injustificables decisiones e intencionados olvidos" en la gestión cultural durante la actual legislatura.

La parlamentaria forista afea al presidente del Principado, Javier Fernández, la unión de Cultura y Deportes con la Consejería de Educación, una de las "más complejas" del organigrama gubernamental, con lo que significó la "pérdida de presencia y eficacia".

También acusa al Ejecutivo de eliminar el 1 por ciento cultural durante toda la legislatura, frenando la inversión en patrimonio que facilitan los presupuestos de obras públicas superiores a 300.000 euros.

"La realidad de nuestro patrimonio cultural, que se encuentra absolutamente abandonado, sólo se explica por la carencia de un proyecto global y la falta de gestión adecuada", indica en un comunicado.

Para la diputada "hablan por sí solas la falta de señalización y conservación del Camino de Santiago, demandada por la sociedad y aprobada por unanimidad en una proposición no de ley por el parlamento asturiana, que como la mayoría de lo que se aprobó ha sido incumplida".

Asimismo, menciona la nula actuación del Gobierno en relación con los Fondos Documentales Asturianos del Archivo de la Memoria Histórica, trasladados ilegalmente a Cataluña.

La diputada se preguntan "qué pasa" con las principales instituciones culturales, y señala que la red de equipamientos, "pretendidamente culturales, repartidos por toda la geografía asturiana y muchos de ellos abandonados, ha sido construida y mantenida, en parte, detrayendo de ciertas instituciones" los recursos económicos necesarios y humanos para cumplirla.

El Museo Arqueológico abre "menos horas que antes de su ampliación y no cuenta con los técnicos necesarios para su desarrollo", abunda García Poo, que manifiesta que el Museo de Bellas Artes de Asturias, "troceado por la recortada ampliación, ha visto reducido su presupuesto en un 50%".

En opinión de la diputada forista, la Ley de Bibliotecas y la de Museos, sigue "durmiendo el sueño de los justos", mientras que el reglamento general del patrimonio cultural es un "proyecto fallido y que debería ser retirado, aunque ahora lo hayan aprobado."

La primera mitad de la legislatura estuvo "plagada de visitas a cuevas y yacimientos, en plan espeleológico, con el único objetivo de salir en la prensa", concluye la dirigente política, que añade que "siguieron luego los viajes a Nueva York usando como pretexto la Ospa".

Y al final del mandato, "surge el culebrón de Grandas de Salime, que evidencia la falta de un proyecto al producirse un choque entre la Consejería de Cultura y un municipio del mismo signo político".