Como dice un viejo refrán, la culpa nació soltera y con ella nadie se casa. Eso mismo es lo que sucede estos días en el sector lácteo con las ayudas anticipadas de la Política Agraria Común (PAC). Se trata de 28,9 millones de euros que, por unos o por otros, todavía no han llegado a manos de los ganaderos en plena crisis de la leche. El Principado alegó el jueves un fallo informático en la plataforma del Ministerio de Agricultura, lo que impedía a la región dar salida a 10.940 expedientes. La consejera de Desarrollo Rural, María Jesús Álvarez, señaló como "única responsable" del retraso a la ministra Tejerina. Ayer fue la propia Tejerina la que se defendió y dio su propia versión de los hechos: "La aplicación no está bloqueada. Está disponible desde el 1 de octubre y es responsabilidad de cada región integrarse a ella". Mientras que la pelota pasa de un tejado a otro, los productores siguen con los bolsillos vacíos, esperando como agua de mayo el dinero. El Principado confía en que llegue la primera quincena de noviembre.

Para ello es necesario que la plataforma informática del Ministerio de Agricultura responda. Y según su titular, Isabel García Tejerina, lo hace: "El programa no bloquea el pago de las ayudas de la PAC, son ya cuatro las comunidades autónomas que han solicitado fondos al Fondo Estatal de Garantía Agraria (FEGA) para abonar los anticipos utilizando la misma aplicación", explicó. El Gobierno central va más allá y asegura que la integración de estos programas informáticos a los sistemas de cada comunidad "es responsabilidad de las propias regiones, mientas que el Ministerio sólo ofrece la colaboración y el asesoramiento".

Por su parte, la Consejería de Desarrollo Rural y Recursos Autóctonos desmintió ayer los argumentos del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Pesca y subrayó "los numerosos e importantes errores" de la aplicación. Prueba de ello es, según el gobierno regional, que "muchas comunidades están en la misma situación". El Principado asegura que está en contacto permanente con los técnicos del FEGA y que por tanto el Gobierno central es conocedor de la problemática. De hecho, considera "poco serio" el comunicado realizado por Agricultura, ya que en su opinión "falta a la verdad".

Entre los controles que la aplicación imposibilita verificar figura el de la carga ganadera debido a que no realiza correctamente el cálculo. Para solucionarlo, aseguran fuentes del Ejecutivo autonómico, están trabajando un gran número de técnicos tanto de la Administración regional como nacional.