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JAIME MAYOR OREJA | Exministro de Aznar, preside la Fundación Valores y Sociedad

"ETA no ha sido derrotada; hoy su proyecto está más fuerte que hace años"

"No hay un problema vasco y un problema catalán: es el mismo movimiento, que abusa de España, al que hay que hacer frente"

Jaime Mayor Oreja, histórico dirigente del PP vasco y azote del nacionalismo, considera que el desafío independentista en Cataluña no tiene marcha atrás e insta a combatirlo con la aplicación de la ley "mejor antes que después". Además, lamenta que el proyecto político de ETA "está más fuerte que hace una década" y ve a Otegui de candidato de Bildu, apoyado por Podemos, en las próximas elecciones vascas.

-¿Se esperaba lo que está ocurriendo en Cataluña?

-Ha pasado lo que tenía que pasar. El movimiento nacionalista termina en ruptura, que es donde está ahora y de donde no va a salir. Tenemos que saber que está instalado ahí no solo en Cataluña, sino también en el País Vasco. No hay un problema vasco y un problema catalán. El movimiento nacionalista es el mismo. Abusa de España y tenemos que saber hacerle frente. No es la primera vez que nos enfrentamos a algo así. ETA también era un proyecto de ruptura, una organización terrorista que era la vanguardia del movimiento. Pues bien, lo que tenemos ahora es otra vanguardia en las instituciones catalanas.

-¿Dispone el Estado de los mecanismos necesarios para hacer frente a este desafío?

-Lo que hay que poner en marcha es un proceso enfrente de ese proceso separatista, con todas las medidas encima de la mesa. Hay que aplicar la ley, mejor antes que después, y es al gobierno a quien le corresponde ordenar cuándo se aplican unas medidas u otras Ellos van a emplearse a fondo y el conjunto de los españoles tendremos que emplearnos a fondo, con el gobierno en vanguardia.

-¿Está derrotada ETA?

-No. ETA no es solo una organización, también es un proyecto. Lo que hemos conseguido es que ya no esté en la vanguardia del movimiento nacionalista, pero su proyecto de ruptura está hoy mucho más fuerte de lo que lo estaba hace cinco o diez años. En las últimas encuestas en el País Vasco, la suma de PP y PSOE da lo mismo que Bildu, lo mismo que ETA. Cómo vamos a decir que se derrotó a ETA en términos de proyecto político... Se la forzó hasta el punto de dejar de ser vanguardia para abrazarse al PNV y a ERC para hacer política, pero su proyecto está fuerte.

-¿Qué valoración hace, en ese escenario, de la labor desarrollada por el PP durante los últimos años en el País Vasco?

-No valoro nunca lo que hacen compañeros de partido. Lo que hoy tenemos es un proceso más vivo que nunca y que ha llevado a las fuerzas políticas constitucionalistas a unas posiciones muy reducidas. El horizonte de 2016 es que va haber una competencia entre dos posiciones. Por un lado, Bildu, con Arnaldo Otegui de candidato y con el apoyo de Podemos. Por otro, el PNV, con Urkullu de número uno. Ellos van a polarizar la elección, cuando en 2001 quienes la polarizamos fuimos los socialistas y los populares -Nicolás Redondo y yo- con el PNV del nacionalista Ibarretxe enfrente. Por el camino ha habido un mal llamado proceso de paz, que ha resultado letal para el PP y para el PSOE y que debe de ser motivo de preocupación y de rectificación.

-¿Le sorprende el auge de Ciudadanos?

-En Cataluña ha acertado. Ha jugado un papel similar al que desempeñamos el PSOE y el PP en 2001 en el País Vasco. En estos momentos, mi preocupación es que en España estamos ante un nuevo adversario, que es un escenario con una amalgama de muchas fuerzas y que ya se ha manifestado en las elecciones municipales con el frente popular-populista. Ese proceso va a continuar en las generales. Ciudadanos ha irrumpido con más fuerza de la prevista a nivel nacional y eso dulcifica el riesgo de una segunda transición, que supondría la segunda parte de la crisis y no el final de la crisis.

-Podemos. ¿Le preocupa?

-A ellos les preocupará que hayan calado menos de lo que parecía. Me preocupan las fuerzas que son populistas y que tienen en su corazón el hartazgo, la rabia, el odio, lo antisistema... Ni un extremo ni el otro. La historia de España da razones para la inquietud ante estos movimientos.

-El PP y Foro, el partido de Francisco Álvarez-Cascos, han firmado un acuerdo para ir juntos a las elecciones de diciembre. ¿Qué le parece?

-Como concepto, todo lo que sean procesos para unir, para curar y para sanar me parecen bien. A partir de ahí, no tengo nada más que decir.

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