Cristina García Montes, una de las personas que acompañaron al exalcalde ovetense Agustín Iglesias Caunedo en los viajes que investiga la juez Pilar de Lara, guarda silencio absoluto sobre este caso de presunta corrupción política y no aclara quien abonó esos desplazamientos. LA NUEVA ESPAÑA telefoneó ayer a esta abogada y perito judicial. Contestó una mujer que aseguró que el comunicante estaba "equivocado", pese a que el número de ese móvil está asociado a un WhatsApp en el que había una fotografía de García Montes y que también incluye un enlace a su página profesional en internet. Vinculada al PP, la letrada era amiga de Iglesias Caunedo, del "abrelatas" Joaquín Fernández y del exedil gijonés Manuel Pecharromán cuando se produjeron los polémicos viajes.