El número de incendios en la región es de nueve, según fuentes de bomberos del SEPA. Siete de ellos están controlados. La cifra era inferior a la registrada el día de Nochebuena, en que llegaron a contabilizarse hasta 16 fuegos forestales, ocho bajo control de los bomberos.

A las ocho de la tarde de ayer continuaban los fuegos en Torazu (Cabranes); Loza (Coaña, este controlado); el incendio que alcanzó dimensiones de tragedia el pasado fin de semana, en Arancedo, Villalmarzo y Brañalibrel, aunque controlado por los servicios de extinción; la Fresnosa (Langreo, también controlado); Nueva (Llanes, bajo control), El Castrillón (Laviana); el de La Roza, en Parres, en el que falleció el pasado miércoles el piloto de helicóptero José Antonio Rodríguez (controlado); el de La Matosa (Piloña); La Barrosa (Tapia); Villamejín (Proaza, bajo control); Porrimán (Morcín); y Parlero (Villayón, también controlado).

Riesgo extremo

El mantenimiento de las temperaturas altas para esta época del año y la ausencia de precipitaciones hace que el riesgo de incendio para hoy sábado sea extremo o muy alto en la mayor parte de la región. Solo se salvan los concejos en el extremo más suroccidental, Ibias y Degaña. Según la Agencia Estatal de Meteorología, el riesgo extremo se concentra en la franja costera occidental, Gijón, Siero, la comarca de la Sidra, las Cuencas mineras, Ribadesella y la parte más occidental de Llanes. En el alto Nalón, los valles del Trubia, la franja costera central y los municipios del centro, el riesgo será muy alto. En los municipios del Suroccidente y los concejos de la Cordillera y Picos de Europa, el riesgo se establece como alto. Esta situación se mantendrá al menos hasta el lunes.