La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) negociará con el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas un aplazamiento de los recortes previstos para este año en la financiación local derivada de las entregas a cuenta por la participación en los tributos del Estado. En el caso de Asturias, esta aportación se reduce en cinco millones. Pasa de 245,2 a 240,2 millones.

Según explicó ayer el presidente de la Federación Asturiana de Concejos (FAC) y alcalde socialista de Navia, Ignacio García, el recorte que prevé aplicar Hacienda este año pretende compensar lo abonado de más en ejercicios anteriores, cuando la estimación inicial para los pagos a cuenta se quedó por debajo de lo realmente recaudado. "Lo que pedimos es que esa devolución no se aplique en su integridad en un solo ejercicio", asegura Ignacio García, que ayer asistió en Madrid a una reunión de la FEMP en la que su presidente, Abel Caballero, alcalde de Vigo por el PSOE, incidió en la urgencia de aprobar una nueva ley de financiación de los entes locales que tenga en cuenta las necesidades reales de los ayuntamientos.

"Necesitamos una ley consensuada y no de éste o de aquel partido", subraya Ignacio García, que argumenta este planteamiento en la asunción de competencias por parte de los ayuntamientos y en su "demostrada capacidad de gestión". Y es que, según sus datos, los 78 concejos de la región cerraron el ejercicio de 2014 con un superávit conjunto de 200 millones de euros.

Las entregas a cuenta de los tributos estatales cuyo recorte inicial ha causado preocupación en no pocos ayuntamientos es un adelanto de las aportaciones estatales a las Administraciones locales que se calcula de acuerdo con la estimación de la recaudación a obtener vía IVA, IRPF e impuestos especiales, y en base a parámetros tales como la capacidad fiscal o la población de cada concejo. La liquidación se hace dos años después.