En el puerto de Pajares quedó cerrado ayer al tráfico de vehículos pesados tras una nevadona que se hizo de rogar pero que llegó con fuerza. Los camiones pasaron, sin embargo, por la autopista del Huerna, aunque también allí la Guardia Civil de Tráfico decretó nivel amarillo y cortó temporalmente la circulación para vehículos articulados. Fueron apenas 23 minutos, entre las dos menos veinte y las dos y tres minutos de la tarde. Hoy se prevén restricciones de tráfico al menos hasta media tarde.