La búsqueda del pequeño Hugo Brandonn Álvarez, de veinte meses, desaparecido en aguas del Cantábrico el lunes de la semana pasada, sumó ayer una jornada más sin resultados. El rastreo entre Navia y Cabo Vidio se vio limitado por las condiciones meteorológicas, por lo que los medios aéreos no pudieron participar. Las rachas de viento de hasta 11 kilómetros por hora en Cabo Busto y Peñas impidieron a los equipos de rescate continuar el rastreo en el mar. Los efectivos desplegados se centraron en revisar las zonas que la bajamar dejó al descubierto, y que no habían podido ser revisadas en jornadas anteriores. Los esfuerzos por encontrar al bebé de veinte meses continuarán mañana, con un nuevo despliegue del operativo que viene trabajando desde el día de la desaparición. Fuentes de Bomberos aseguraron a este periódico que, una vez se suspenda el operativo, efectivos de este cuerpo continuarán trabajando en la zona, en busca de pistas sobre el paradero de los restos mortales del menor. El fuerte oleaje no ayuda en estas tareas, con picos máximos ayer de 9,83 metros según el registro de Cabo Busto, ayer.