Los ocho detenidos en Asturias por la operación "Pértiga", que investiga una trama de tráfico de sustancias anabolizantes, desfilaron ayer por los juzgados de Oviedo, visiblemente cansados, tras pasar dos noches en los calabozos de la Comisaría de General Yagüe bajo la presión de las investigaciones, careos e interrogatorios del grupo de dopaje de la Unidad Central de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV). La visita fue "de médico", porque se negaron a declarar ante la titular del Juzgado de instrucción número tres, Begoña Fernández, de guardia esta semana, que decidió dejarlos en libertad, aunque la investigación sigue abierta y bajo secreto de las actuaciones. La Policía no ha abandonado el entorno de los detenidos. Dos de ellos fueron un poco más explícitos, en sede judicial al ratificar lo que habían contado a los investigadores en Comisaría: que no tienen ni idea de hormonas del crecimiento ni de tráfico con sustancias dopantes.

El último en abandonar los juzgados fue el exvelocista Pedro Pablo Nolet, encargado de la tienda de la cadena investigada, Nutrifrog, en los bajos del gimnasio de concesión pública Go Fit de Oviedo. Lo hizo en compañía de su esposa y también de su abogada, Ángeles Lázaro. Consciente de la expectación en el exterior, preguntó a su letrada si debía salir corriendo para evitar la foto. Le aconsejaron que no, que saliese tranquilo "porque no había nada que ocultar". Aún así, lo hizo por una puerta diferente. A la carrera sí dejaron el juzgado otros tres detenidos: el propietario de la cadena de tiendas, Pablo Castro, su esposa B. C. M., y el encargado de la tienda de Avilés, P. P. M. El entorno de este último lo desvincula de cualquier actividad ilegal: "Salió sin cargos y sin fianza". Tras la puesta en libertad de los arrestados, algunas de las tiendas de Nutrifrog volvieron a abrir.

Los letrados explicaron que habían recomendado a sus defendidos no prestar declaración puesto que, toda vez que las actuaciones siguen siendo secretas, no han tenido acceso a las diligencias y no saben de qué acusan a cada uno de sus clientes. Fuentes policiales de la lucha antidopaje han ido ofreciendo en los días previos detalles de la investigación, con quince detenidos en todo el país, tres de ellos agentes de las fuerzas de seguridad, en concreto dos guardias civiles y un policía local (los tres fuera de Asturias). También se han producido detenciones en Barcelona, Madrid, León y Badajoz.

Se han efectuado un total de veinte registros, en los que los agentes han intervenido numerosas medicamentos relacionados con el dopaje de competición: hormonas del crecimiento, anabolizantes y estimulantes (Stanozolol, Pregnyl y Nandrolona). Los investigadores creen que los "cabecillas" de la red importaban estos productos desde el extranjero para venderlos a sus contactos en gimnasios, así como a deportistas de competición del mundo del piragüismo y el boxeo.

La redada más llamativa fue la de la tienda de Nutrifrog de Ovidedo, situada en el gimnasio cedido en el mandato del PP a la empresa Go Fit para librar una de las fallidas operaciones de los "spa" de Gabino de Lorenzo. La vicealcaldesa Ana Taboada (Somos) anunció ayer que el Gobierno tripartito local realizará una"fiscalización" de la gestión, el buen uso y la concesión del gimnasio". También aseguró que van a "vigilar" los servicios prestados en estas instalaciones y a invesigar "el grado de conocimiento e implicación de sus gestores" en la operación antidopaje bautizada como "Pértiga".

La Agencia Española de Protección de la Salud en el Deporte (Aepsad) ha solicitado al juzgado una confirmación oficial de la implicación en la investigación de deportistas con licencia federativa española con el fin de "poder iniciar actuaciones sancionadoras".