El temporal de nieve y lluvia amargó ayer a más de uno su viaje por carreteras asturianas. El mal tiempo obligó a cerrar durante horas al tráfico pesado el puerto de Pajares. Las vías de acceso a los Lagos de Covadonga y Las Caldas (Oviedo) también sufrieron los embates de la borrasca que azota estos días a la región. Hoy los cielos estarán bastante despejados, aunque no se descarta lluvias. En cualquier caso, nada que ver con la granizada que cayó ayer en diversos puntos de la región. Las temperaturas máximas irán en ascenso, con 15 grados en Oviedo.

El desprendimiento de tierra que afectó a la carretera de Los Lagos se produjo a la altura de El Repelao, ocupando por completo el carril derecho en dirección a Covadonga. Una empresa contratada con urgencia por la administración local se ocupó de retirar las piedras para restablecer el tráfico. Con la misma premura se actuó en la AS-322, en las inmediaciones de Las Caldas. Efectivos de la Policía Local de Oviedo se desplazaron hasta la zona para evaluar los daños y asegurar el talud.