La Junta General del Principado ha pedido hoy a la Sindicatura de Cuentas que lleve a cabo una auditoría integral de la deuda de la comunidad autónoma que evalúe la eficiencia y la eficacia en el uso de recursos públicos al aprobar una iniciativa de PP y Foro apoyada por Podemos, IU y Ciudadanos.

La propuesta, que ha contado con el voto en contra del PSOE, reclama del órgano fiscalizador que verifique si los préstamos recibidos por el Principado han sido destinados a los fines para los que se autorizaron y que determine qué parte de la deuda se ha dedicado a sufragar los sobrecostes de la obra pública.

En la defensa de la iniciativa, la portavoz de Foro, Cristina Coto, ha recordado que a finales de 2015 la deuda viva del Principado se elevaba a 3.876 millones, lo que supone un aumento del 11,4 por ciento en relación a 2014 y se sitúa en el 18 por ciento del producto interior bruto (PIB), 1,3 puntos más que un año antes.

Además, ha incidido en que al cierre de 2012 la deuda de Asturias ascendía 2.675 millones de euros con lo que en 36 meses aumentó en 1.201 millones, 33,3 millones de euros al mes, una cifra que "da al traste" con el "mantra" del Gobierno regional de que el Principado tiene un menor endeudamiento que otras comunidades autónomas.

Coto ha recordado también que la Sindicatura advirtió en su informe sobre la Cuenta General del Principado de 2014 que, si se mantiene el ritmo de endeudamiento de los últimos años, se puede "comprometer a futuro la situación económico-financiera de la comunidad".

En términos similares se ha expresado la portavoz del PP, Emma Ramos, que ha calificado la deuda autonómica de "pozo sin fondo que sigue creciendo" mientras el Gobierno regional duplica, como en 2015, el límite de déficit legalmente establecido y sigue elaborando presupuestos con ingresos "inflados" de difícil cumplimiento.

"Somos una comunidad endeudada y con un déficit desproporcionado. Es necesaria una auditoría que arroje algo de luz sobre la situación de Asturias, donde se gestiona de pena y se miente reiteradamente", ha añadido Ramos.

Para la portavoz socialista, Margarita Vega, el planteamiento que recoge la iniciativa hoy aprobada constata que "el cinismo no conoce límites" al tratarse de una propuesta "redundante, tendenciosa y hasta retorcida" que recurre a "elaboraciones de laboratorio" para ofrecer una visión negativa de la situación de Asturias.

En este sentido, y tras emplazar a PP y Foro a aclarar si se refieren a políticas sociales cuando hablan de "gasto improductivo", Vega ha recordado que entre 2012 y 2015 el conjunto de las comunidades autónomas elevaron su deuda en 6,1 puntos porcentuales respecto al PIB mientras que Asturias lo hizo en un 5,5 por ciento.

De esta forma, ha subrayado, el volumen de deuda del Principado se situaba al finalizar el pasado ejercicio en el 18 por ciento de su PIB regional, seis puntos por debajo de la media nacional.

Por su parte, Podemos ha reprochado al actual Gobierno que tenga "el dudoso honor" de ser el primero cuya gestión lleva a que la cuantía de la deuda supere al del presupuesto anual del Principado tras experimentar un crecimiento "demasiado llamativo" en los últimos años y ha considerado necesario aclarar a qué se destinaron los préstamos y por qué se asignaron a determinados gastos.

No obstante, su portavoz, Enrique López, ha advertido de que su grupo no comparte que el problema del endeudamiento de la administración deba achacarse al sector público cuando, a su juicio, debe atribuirse en primer lugar "a la mala gestión".

Para el portavoz de IU, Gaspar Llamazares, pese a tratarse de una iniciativa "redundante e inconsistente" su grupo la apoyaría dado que dicha auditoría ya está prevista en el programa anual de la Sindicatura y ha advertido al PP de que "hay que tener cuajo" para defenderla cuando, a nivel estatal y con un gobierno popular, la deuda pública se ha situado por encima del 100 por ciento del PIB.

Por su parte, el diputado de Ciudadanos Armando Fernández Bartolomé, pese a advertir que se trata de una asunto "serio" que está llevando a Asturias a la "ruina", ha lamentado que se utilice un asunto como la deuda "para hacer política de bajo vuelo".