"Estoy ilusionadísima y dispuesta a desplazarme donde haga falta con tal de entrar en la compañía". Alejandra Poo, de 19 años de edad y residente en Cangas de Onís, participó ayer en Oviedo en las pruebas realizadas por Vueling para seleccionar a nuevos tripulantes de cabina con los que hacer frente a las necesidades de la temporada estival. La previsión de la aerolínea es incorporar de manera inmediata, para el mes que viene, a 400 empleados. Para ello, está celebrando actos como el de ayer -denominados "Open Day"- en varias ciudades españolas. Al de Oviedo asistió un centenar largo de aspirantes, muchos de fuera de la región. Es el caso del jienense Álvaro Omedas, que afrontó la jornada con "muchas ganas", al igual que Sabrina Martínez, una cartagenera de 30 años atraída por "el gran dinamismo" que aprecia en el sector aéreo.
La prueba arrancó con una charla sobre las condiciones de los empleos, el perfil profesional que se busca y las características de la compañía. Por la tarde se celebraron las entrevistas personales. Según Silvia Rego, jefa de Servicio a Bordo de Vueling y responsable de la selección de tripulantes de cabina, los requisitos exigidos a los aspirantes son "una edad mínima de 18 años; Bachillerato, Formación Profesional o equivalente; conocimientos de inglés, o de castellano en el caso de los extranjeros; superar una examen médico de la clase dos, y tener habilidad para nadar, así como una buena presencia física y vocación de servicio".
Los aspirantes seleccionados accederán a un cursillo organizado por la compañía en Barcelona. Tiene un coste de unos 3.000 euros y parte se puede abonar con las primeras nóminas. Algunas familias se mostraron ayer preocupadas por la letra pequeña de la convocatoria. "Además de pagar la estancia de mi hijo un mes fuera de casa, 1.500 euros son a fondo perdido para el coste del curso y el resto, si finalmente lo contratan, se lo descontarán de la nómina, que no se sabe de qué cantidad se trata", señaló el padre de uno de los aspirantes.
