Un millar de multas en esta semana. Este es el resultado de la última campaña de campaña de vigilancia de la conducción en carreteras convencionales, que la Dirección General de Tráfico realizó en Asturias entre el 3 y el 9 de octubre. El exceso de velocidad, el consumo de alcohol al volante y un inadecuado mantenimiento del vehículo son las tres razones fundamentales que llevaron a los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de Asturias a multar a los conductores.

Al cierre de esta campaña, 730 conductores han sido denunciados por exceso de velocidad, 32 personas más fueron igualmente denunciadas por circular sin cinturón de seguridad y dos más por viajar con dos menores sin utilizar el sistema de retención infantil. Además, otro 34 vehículos fueron detectados en el marco de la misma campaña de vigilancia circulando con importantes deficiencias técnicas y 61 conductores más dieron positivo en los preceptivos controles de alcohol. En drogas se registraron 21 positivos.

Así, desde la DGT entienden que el cumplimiento de los límites de velocidad continúa siendo una de las asignaturas pendientes de la seguridad vial a la vista del número de conductores denunciados por este motivo.

El envejecido parque automovilístico en España y la falta de mantenimiento de los mismos es otro de los asuntos que preocupa a los gentes pues esta realidad hace que circulen por las carreteras vehículos con deficiencias técnicas con el riesgo que implica para la seguridad vial. A ello se suma la presencia de conductores en esta última campaña de la DGT que bien no llevaban o no tenían al día su documentación personal o la del vehículo. Una mayoría de denuncias vienen también por no tener pasada la ITV.