La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La nieve no pasa de Tuiza

"Nunca vimos un invierno tan flojo como éste", dicen los vecinos del pueblo lenense, a 1.300 metros, a una semana de la primavera

Nieve en Tuíza de Arriba

Nieve en Tuíza de Arriba

Para ver este vídeo suscríbete a La Nueva España o inicia sesión si ya eres suscriptor.

Nieve en Tuíza de Arriba Tuiza (Lena), Mónica G. Salas

"¿Dónde está el invierno?". Más de ochenta días de estación gélida en Asturias y Blanca Pulgar todavía no vivió un temporal en condiciones. La lenense es, junto a su marido Víctor Álvarez, la única habitante de Tuiza de Arriba, un pueblo enmarcado en el parque de Las Ubiñas a 1.300 metros de altitud y expuesto a las inclemencias del tiempo. "No nevó nada que valiera la pena", asegura la mujer, rodeada de cinco de sus ocho perros. El temporal "Bernd", puede que uno de los últimos antes de la entrada el próximo lunes de la primavera, no pasó de Tuiza. Fue otra borrasca "light". El manto de nieve no superó los cinco centímetros de espesor y a la una del mediodía comenzó a derretirse bajo un sol que iba y venía. La alerta naranja por nevadas fue más un espectáculo blanco que un día negro de cadenas y carreteras cortadas.

En Tuiza no se recuerda un invierno tan "cálido" como el que está a punto irse. Lo peor vino en noviembre, aunque duró poco: "La capa de nieve llegó hasta los veinte centímetros y estuvimos uno o dos días incomunicados". Nada en comparación con lo que hubo el invierno anterior o el anterior o el anterior... "En febrero de 2015, los copos cubrieron el portón del garaje. Un metro. La quitanieves tardó casi quince días en llegar", cuenta Pulgar, que se dedica al ganado. Su hija Lidia Álvarez, de visita estos días en la casa familiar, quedó "asombrada" con las temperaturas registradas la pasada semana en todo el Principado. Los termómetros llegaron en Oviedo hasta los treinta grados. Un ejemplo más de este invierno atípico, en el que no hubo ni mucho frío ni mucha nieve.

Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), el mercurio bajó del sábado al domingo hasta doce grados. Ayer la máxima fue de 14,6 grados en Gijón y la mínima de 3,1 bajo cero en el puerto de Leitariegos, donde además se registraron rachas de viento de 80 kilómetros por hora. Hoy las temperaturas volverán a subir entre dos y seis grados. El anticiclón "Kathrin" desplazará poco a poco a la borrasca "Bernd". "El invierno no apareció", expresa una vecina de Riospaso, el pueblo siguiente a Tuiza. "Llevo aquí los años que tengo, ochenta y tantos, y nunca vi una estación cómo esta". La nieve no hizo acto de presencia ni ayer ni ningún otro día de lo que va de año. Quizá venga en primavera, ya que el tiempo está alterado. "Los paisanos de aquí dicen que lo peor vendrá ahora", expresa Diego Triguero, al frente de la Hostería del Huerna. Desde allí, sólo se aprecian las cúspides cubiertas de blanco.

De la montaña al mar. Asturias también estuvo ayer en alerta amarilla por fenómenos costeros. La boya del Observatorio Marino de Asturias en Cudillero registró una altura máxima de ola de 6,12 metros a las dos de la tarde. Para hoy la Aemet ha desactivado todas las alertas y prevé cielos nubosos, con lluvias débiles y dispersas que remitirán por la tarde. La cota de nieve se quedará en torno a los 1.500 metros, es decir, no llegará ni siquiera a Tuiza de Arriba. Así serán los últimos coletazos de un invierno casi desaparecido.

Compartir el artículo

stats