Pedro Castillejo, que fuera máximo responsable de la Fundación del SOMA para la Formación, la Investigación, la Documentación y los Estudios Sociales, Infide, aseguró ayer que la investigación sobre sus gastos responde a una "persecución personal" porque "me negué a participar en la campaña de descrédito a una persona", en clara referencia al exlíder minero José Ángel Fernández Villa, denunciado por el SOMA por presunta apropiación indebida. Castillejo aseguró que todos los gastos que hizo con tarjeta correspondieron a su labor como directivo al frente de Infide, que están justificados y que no hubo gastos personales de ningún tipo.

La declaración de Pedro Castillejo, solicitada por él mismo y que se tenía que haber celebrado ayer por la mañana, ha sido pospuesta hasta el próximo martes, día 11, para que las otras partes personadas en el caso puedan estudiar la "ingente" documentación que presentó ayer ante la jueza instructora del caso Villa, Simonet Quelle Coto.

A la salida del juzgado, Castillejo explicó que ha utilizado su agenda de trabajo para justificar dónde estaba y con quién en cada uno de los gastos que figuran en la auditoría encargada por el SOMA, que le reclama 118.236 euros. "Entre 2004 y 2007 es difícil, pero entre 2008 y 2013 sí he hecho la estimación día a día, mes a mes y año a año basado en mi agenda y en el extracto de lo pagado con la tarjeta", aseveró.

Y explicó varios de los gastos. Por ejemplo, aseguró que nunca estuvo en México y que una de la facturas que aparece es de un restaurante mexicano que está en Madrid, cerca del IFEMA. En cuanto a los algo más de 2.000 euros que figuran en una factura en Forum Sport, remarcó que el SOMA le encargó hacerse cargo de la logística para la marcha minera y que ese dinero corresponde al pago de sacos de dormir, colchonetas, calcetines, etcétera. Sobre los gastos en sidrerías, remarcó: "Como todos los días, lo juro, y me gusta más comer en una sidrería, aunque tenga el mantel y las servilletas de papel que en un restaurante de lujo". Sobre los pagos de material eléctrico, aseguró que se correspondió a la exposición del centenario del SOMA. Y en Tartiere Auto, porque tenía que ir a Madrid, se estropeó su coche y alquiló otro durante tres días.

"Todo está ahí. Puedo justificar 70.000 euros y más. Se me ha jodido la vida, se me ha quitado la honra y el crédito. Era una persona conocida y respetada y ahora soy un presunto delincuente. Castillejo siempre ha dado la cara. Pido respeto y ética y responsabilidad", aseveró. También añadió que va a "contestar a todo lo que se le pregunte" y "ayudar a aquellas personas que ahora tienen lagunas de memoria para que la recuperen".

El abogado del SOMA, Luis Llanes, del despacho de abogados Ontier, aseguró posteriormente que la documentación aportada por Castillejo y su abogado, Alfredo García, "no cambia absolutamente nada" y que se trata sólo "de otra maniobra dilatoria. Pide declarar y presenta toda esa documentación un año y medio después, lo que fuerza a suspender de nuevo la declaración, pero sigue sin explicar dónde está el dinero y a qué se ha destinado. No creo que lo que ha aportado sea significativo".

Llanes también se refirió a la solicitud de incapacidad de Fernández Villa ante la Fiscalía: "Es legítimo, pero todo esto responde a una estrategia destinada a prolongar de manera artificiosa los tiempos".