La agricultura ecológica asturiana continúa su imparable ascenso en la región y suma ya un total de 655 operadores, de los que 400 son productores, 95 empresas de elaboración y envasado y 161 puntos de venta y comercializadores. El avance queda patente respecto a 2016, cuando en el Principado se registraban 384 productores y 79 elaboradores.

Los datos del Consejo Regulador de la Producción Ecológica (COPAE) ponen de relieve el crecimiento de las empresas de elaboración y envasado. En 2017 se batió el récord de inscripciones, con 16 entidades nuevas. El dato indica que, aunque de una forma tímida, la transformación de los productos lucha por quedarse en Asturias, y de ese modo dejar en la región el importante valor añadido que genera.

De hecho, el aumento de facturación se debe principalmente a los productos elaborados por industrias agroalimentarias que abren una línea de productos ecológicos como respuesta a la demanda de la gran distribución.

Las ganaderías de leche ecológica también van ganando peso, ya que pasaron de 28 en 2016 a las 35 consignadas actualmente.

El sector lácteo asturiano tiene al alcance de la mano las condiciones idóneas para producir leche eco. Carlos Nuño, director técnico del COPAE, asegura que Asturias y el resto de las zonas lecheras de España deberían seguir la senda de Francia, el segundo país que más leche ecológica produce, después de Alemania, con un ambicioso plan en marcha para llegar a mil millones de litros anuales y unas 2.500 explotaciones acreditadas.

Los productores esperan ahora con máximo interés la resolución definitiva del nuevo reglamento de producción ecológica que prepara la Unión Europea, llamado a entrar en vigor en el año 2021. El director general de Desarrollo Rural, Jesús Casas, indicó ayer que a la normativa "aún le queda un largo recorrido" antes de ser aprobada.