Un grupo de afectados por enfermedades metabólicas congénitas, que han de someterse a dietas rigurosísimas, y trece familias de Malí que sufren situaciones de pobreza extrema, son los beneficiados directos de los proyectos premiados ayer en Oviedo por la Fundación Alimerka. El acto de entrega se celebró en la sala de Cristal del Palacio de Exposiciones y Congresos.

"Trabajamos con mujeres viudas y mayores, tres palabras que resumen los prototipos de discriminación en África", destacó Janeth Patricia Aguirre, monja colombiana responsable del proyecto premiado en la categoría de Lucha contra el hambre. Se trata de un programa de la ONG Médicus Mundi Asturias denominado "Seneleka Sisibere" ("El esfuerzo de las cultivadoras").

En la categoría de Nutrición, la distinción ha recaído en la Unidad de Diagnóstico y Tratamiento de Enfermedades Metabólicas Congénitas del Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela. Esta unidad ha diseñado el programa informático (Odimet®), dirigido a facilitar el cálculo y manejo dietético de los pacientes con enfermedades metabólicas hereditarias, consiguiendo una dieta individualizada para cada paciente. Esta base de datos de acceso libre permite a los pacientes un uso adecuado de unos 3.000 productos dietéticos y alimentos. Más tarde, crearon otro programa informático específico (Ketodieta®) para el cálculo dietético y seguimiento nutricional de pacientes con dieta cetógenica.

"Asesoramos a los usuarios para que puedan cumplir sus dietas, que suelen ser muy rigurosas, y organizamos talleres de cocina para que los pacientes puedan hacer más atractivos los regímenes que han de seguir", señaló Paula Sánchez Pintos, pediatra de la unidad. A la citada base de datos "puede acceder cualquier persona con sólo registrarse", indicó al doctora Sánchez, aludiendo al potencial de una herramienta informática al alcance de todos.

Los premios de la Fundación Alimerka llevan el nombre de Luis Noé Fernández, fundador de la cadena de distribución de alimentos. Los galardones han alcanzado la octava edición de un certamen creado con el fin de reconocer las buenas prácticas en los ámbitos de la nutrición y la acción social contra el hambre.

Antes de la entrega de los galardones, en la sede de la Fundación para la Investigación y la Innovación Biosanitaria en Asturias (Finba), aneja al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), un grupo de profesionales y familiares de pacientes con enfermedades metabólicas congénitas participaron en un taller de cocina metabólica impartido por la unidad hospitalaria galardonada en la categoría de Nutrición.

Por su parte, la religiosa Janeth Patricia Aguirre, encargada del proyecto premiado en la categoría de Lucha contra el hambre, participará el próximo lunes en un encuentro con alumnos del Instituto de Llanera. El centro educativo también acogerá una exposición sobre la iniciativa de Mali, cuyo objetivo se centra en apoyar a un grupo de trece viudas de Koulikoro que trabajan en un huerto como única forma de supervivencia para ellas y para sus familias. En los dos últimos años, subrayó la monja colombiana, las mujeres han asistido a cursos de alfabetización, han mejorado su salud con la compra de nuevas semillas e, incluso, han formado una cooperativa. Con la ayuda canalizada a través de Médicus Mundi Asturias, han logrado no sólo obtener una producción suficiente para el autoconsumo, sino también para la venta.