El presidente del Principado, Javier Fernández, no acudirá el próximo fin de semana al tradicional homenaje al fundador del SOMA, Manuel Llaneza, tío abuelo del propio Fernández. Javier Fernández lo ha comunicado, a preguntas los periodistas que han acudido al cónclave entre presidentes autonómicos que se ha celebrado esta mañana en León.

"No voy a contribuir a nada que divida al partido, ni por supuesto a nada que vaya a envenenar el aire de convivencia y de respeto de la organización. Ahora bien yo ya no soy secretario general y no voy a ir a los lugares en los que no se me estima o no se me aprecia; por tanto no voy a ir", ha dicho escuetamente a la pregunta de si acudirá al homenaje a Llaneza en el cementerio de Mieres.

Una polémica conversación por Whatsapp en un grupo de mensajería de unos 50 miembros, revelada por LA NUEVA ESPAÑA, registra cómo exdirigentes del PSOE de Mieres y dirigentes del SOMA plantean boicotear el acto de entrega al Presidente del premio que otorga la asociación "Mierenses por el mundo".

"Sobre eso no quiero decir nada", ha señalado Javier Fernández, en tono severo a la pregunta sobre el contenido de los mensajes.

En la conversación participan entre otros, el exalcalde de Mieres Luis María García; el exsecretario de organización del SOMA, José Luis Fernández Roces; el exconcejal socialista Dimas Martínez, y el secretario de organización mierense, Eduardo Martín.

Incluso proponen que la ejecutiva local del partido oficialice el plante de cargos socialistas al Presidente. Eduardo Martín, interviene en la conversación pero para afirmar que está "de acuerdo" "pero reconocer que se tendrá que tratar en la ejecutiva". La secretaria general del PSOE de Mieres, Ana Cachero, interviene en el diálogo, pero únicamente para publicar el anuncio de una asamblea abierta en la que participará Adrián Barbón.

La expresión más dura para referirse al presidente proviene del exalcalde de Mieres, Luis María García, quien afirma: "Espero que no asista nadie oficialmente de la agrupación. No es solo por Javier, es por la banda que está alrededor de esos premios". Y añade: "No querría yo un premio que me concedieran esos cacos".

Luis María García, que fue precisamente director general de Minas cuando Javier Fernández era consejero de Industria, considera "triste" la situación del presidente por recibir el premio. "Mi desprecio más absoluto a todos ellos: premiado y premiadores".

Justamente uno de los argumentos esgrimidos por quienes planteaban el boicot al acto de reconocimiento a Fernández era que no hubiese asistido al acto organizado por el PSOE de Mieres para celebrar los 100 años desde que Llaneza fuera investido como alcalde. Llaneza fue tío abuelo del Presidente, ya que es sobrino de Arístide Llaneza, hijo del histórico socialista.

A este asunto se ha referido también esta mañana el portavoz del PSOE en la Junta General, Marcelino Marcos Líndez, al afirmar: "No creo que nadie del partido vaya a poner ahora en cuestión, con un veto o un boicot, la gestión de Javier Fernández al frente del Gobierno". Irónicamente ha señalado: "Si ya los políticos metemos la pata muchas veces en público imagínense que podremos hacer en privado".

Si algo de esa conversación ha molestado a los afines a Javier Fernández es que se plantee "oficializar" el boicot con un debate en la ejecutiva municipal. De ahí que en algunos sectores del partido no se haya entendido que el secretario general de la FSA, Adrián Barbón, no haya condenado ese planteamiento.

El pasado sábado, durante el comité federal del PSOE en Madrid, Barbón censuró que haya trascendido la conversación, pero no condenó la maniobra que debatían algunos dirigentes del partido y el sindicato para plantar a Fernández en el acto de entrega de la medalla del colectivo "Mierenses en el Mundo".

"Que el Whatsapp de un grupo de militantes, no de un órgano de partido, trascienda y se convierta en objeto de debate público es vulnerar todo límite en política. No todo vale y no creo que la gente de la calle lo entienda. Es algo que carece de importancia", dijo Barbón.

"No todo vale. Yo nunca revelo una conversación privada, ni presencial ni telefónica, por eso no voy a valorar algo que vulnera la privacidad", dijo entonces el secretario general de la FSA.