La Coordinadora Ecoloxiata d'Asturies ha lamentado que el Gobierno Principado haya autorizado la ampliación del vertedero de El Cotaron, en la parroquia de Logrezana, en el concejo de Carreño. Este vertedero que va ocupar una superficie de mas 627.000 metros cuadrados, carece de estudio de impacto ambiental y se impulsa sin atender las alegaciones que había presentado el colectivo.

El Principado permite la ampliación, "a pesar de su situación de precariedad, al no haberse tomado medidas de restauración alguna en todos los años que lleva funcionando, medidas que reiteradas veces habíamos exigido", ha señalado la Coordinadora, que resalta la "larga historia" de este vertedero, en la que "se acumulan las irregularidades que ni el Principado ni el Ayuntamiento de Carreño han querido obligar a subsanar a las diferentes empresas que lo usaron". La última conocida, según los ecologistas, fue cuando en el año 2010 se vendieron materiales del vertedero para el relleno de El Musel, más de 200.000 metros cúbicos de materiales "sin tener licencia para ello la empresa".

"La experiencia que hay en Asturias es que los vertederos de tierra, se sacaba echando de todo sin control, baste el ejemplo del vertedero de Pinzales en la misma parroquia de Logrezana en Carreño, durante décadas se estuvo echando de todo, al final se tapó con tierra", añade el colectivo, que destaca que esta actividad de vertedero tiene una "clara afección sobre el suelo, en cuanto se modifica este al rellenarse con materiales ajenos. Hay que recordar que en Asturias está llena de vertederos de residuos, que se están ampliando sin ningún control", denuncia la Coordinadora.

"Creemos necesario que se vigile, que solo son admisibles vertidos de tierras de excavación, excluyendo expresamente la presencia de residuos de la construcción entre el material vertido; asimismo, es necesario garantizar que no se van a verter suelos susceptibles de estar contaminados, lo que suele ser habitual en Asturias por la ingente cantidad de suelos contaminados que hay, sobre los que muchas veces se hacen movimientos de tierras", indican los denunciantes, que destacan que se pretende el vertido de 322.500 metros cúbicos, aumentando la altura del vertedero hasta los 38 metros sobre la actual cota.

La Coordinadora ha anunciado que seguirá exigiendo las siguientes medidas:

-Las zonas de tránsito de vehículos se acondicionarán a fin de evitar las emisiones difusas de polvo al salir a la carretera, se dotarán de firmes adecuados y se establecerán sistemas de riego.

-La salida de vehículos desde el área de explotación a las carreteras de uso público se realizará previo paso por un sistema de limpieza de vehículos y sus neumáticos para evitar el actual polvo de la vía, que la hace extremadamente peligrosa para la circulación de los vehículos.

-Rebajar la incidencia acústica de esta ampliación sobre las viviendas y núcleos de población cercanos.

-Con el fin de minimizar los impactos paisajísticos, se realizará un apantallamiento perimetral de la explotación con especies autóctonas que estará implantado por fases según se van rellenando las diferentes terrazas previstas para paliar el impacto visual.