Raíces, Inés MONTES

La tercera campaña de excavaciones en el yacimiento arqueológico del castillo de Gauzón se cierra el próximo día 30. Han sido cinco meses de trabajo de campo tras los que el equipo de arqueólogos que dirige Alejandro García e Iván Muñiz comenzarán el 2 de noviembre a redactar la memoria en el laboratorio provisional que se instalará en el centro de interpretación de Raíces Viejo. Esta última campaña ha sido también la primera en la que se organizaron visitas guiadas al Peñón y que concluirán el viernes. Han pasado por el yacimiento más de medio millar de visitantes.

«Las visitas guiadas han sido un éxito. Desde que comenzaron, el 1 de agosto, han pasado más de 500 personas por el Peñón, sin contar los alumnos de los colegios de la comarca. Estos tres meses no han sido suficientes para responder a todas las peticiones. El próximo año queremos iniciarlas antes», aseguró el concejal de Hacienda y Patrimonio de Castrillón, Ramón Martínez Campo. El Ayuntamiento destinó 60.000 euros a la campaña que ahora concluye.

El castillo de Gauzón ha sido elegido también por el Gobierno municipal (IU-PSOE) como eje de la promoción turística del concejo. «Desde esta semana ya disponemos de un pack promocional para regalar a las autoridades y visitantes ilustres que recibamos en el Ayuntamiento», dijo Martínez Campo. El lema «Castillo de Gauzón. Raíces de Asturias» está grabado sobre una caja de madera que contiene una insignia de plata de la Cruz de la Victoria, un DVD de ocho minutos de duración con la historia de la fortaleza medieval y un libro con fotos de las excavaciones en el yacimiento del Peñón de Raíces. Un resumen de los resultados de las excavaciones comenzadas en 2007 ha servido para publicar un nuevo folleto turístico del castillo, editado recientemente por el Ayuntamiento y la Consejería de Cultura y Turismo del Principado.

En estos tres años de trabajo, los arqueólogos han conseguido documentar la existencia de un primer asentamiento fortificado que datada del siglo VII y que fue reformado por el rey asturiano Alfonso III a finales del siglo IX. El rey, en el año 908, usó el taller de orfebrería del castillo para cubrir de piedras preciosas la Cruz de la Victoria.