Saúl FERNÁNDEZ
«Teatro Margen» abre esta noche (20.15 horas) las puertas del infierno de Jean-Paul Sartre en el estreno de «A puerta cerrada», la tragedia que ilustra la penosidad de la vida y la ligereza de la muerte. La producción -cuyo estreno absoluto acoge esta noche el teatro Palacio Valdés- es la segunda función escrita por el filósofo que dio forma al existencialismo y marcó, así, el progreso intelectual de la segunda mitad del siglo pasado.
«A puerta cerrada» es un espectáculo de algo más de una hora y cuarto que presenta a tres desconocidos en la misma recepción del averno que, por el arte de Arturo Castro, el director de la compañía ovetense, tiene forma de estudio de un programa de telebasura.
«A puerta cerrada» se llamó, en principio, «Los otros», ya que Sartre entendía que el infierno cristiano no es el infierno cierto, porque las penas se pagan en vida, rodeados de los demás.
