Tras un mes de vacaciones, el centro de pensionistas de Cajastur en Las Meanas no abrió ayer sus puertas, se lamentaban los habituales usuarios de estas instalaciones de la calle Cuba. Los socios que acudieron por la mañana al local con la intención de leer el periódico, echar una partida a las cartas o simplemente tomar un café se encontraron con el candado echado y un único cartel que dice "cerrado por vacaciones". "¿Por qué no está abierto si ya es uno de septiembre? Esto no pinta nada bien", comentaban los mayores reunidos en pequeños grupos en el recién remodelado parque de Las Meanas. "Empezaron cerrando los sábados y festivos, luego suprimieron el coro y numerosas actividades, como gimnasia o manualidades, quitaron las excursiones y el baile, tampoco se celebra ya el sorteo de cestas en Navidad, e incluso echaron a la peluquera, que cortaba el pelo por cuatro euros", apuntaban con indignación Benito Hernández García, Ángel Alvarez Díaz, Eloy Valverde Alonso y Ernesto Vázquez Vázquez, entre otros.
"Si lo acaban clausurando, cerramos la cartilla, sacamos el dinero y cambiamos la pensión a otro banco. Y si es necesario, nos manifestamos", manifestaron los mayores con notables dosis de indignación y pesimismo ante el futuro que les depara. "Esto no tiene trazas de abrir", añadió Ceferino Martínez Rodríguez, "y necesitamos este local, que además está muy bien situado", indicó Manuel García García: "siempre está muy concurrido, tanto de hombres como de mujeres, y más en invierno. Si cierran, cuando haga frío, ¿qué vamos a hacer?", se preguntaban los mayores.
