Los vecinos de San Miguel de Quiloño despidieron a su párroco, José Manuel Vázquez, en la foto, con una misa en la que leyeron una emotiva carta de agradecimiento a la labor que ha realizado durante estos dos años, de la que destacan las obras de restauración de la iglesia. El joven sacerdote, que será trasladado a la parroquia de La Corredoria en Oviedo, se ganó el cariño de los vecinos por su "cercanía, amabilidad e implicación con el pueblo", según aseguran los vecinos. Para finalizar la despedida, los residentes en Quiloño y en pueblos cercanos participaron en una espicha de despedida, informa G. FERNÁNDEZ.