Carmen Rodríguez Maniega optará hoy a la presidencia del Partido Popular de Avilés en una junta local extraordinaria prevista para las 19.00 horas en la sede local de la formación después de que la dirección regional descartase crear una gestora tras la dimisión de Joaquín Aréstegui, tal y como adelantó ayer LA NUEVA ESPAÑA. La diputada nacional tiene todas las papeletas para resultar elegida ya que la inmensa mayoría de los miembros del órgano le han mostrado en las últimas horas su apoyo en conversación telefónica. No obstante, su candidatura ha encontrado el férreo rechazo de varios concejales populares, al entender que su nombramiento imposibilita una suficiente renovación. Además, los críticos lamentan el poco margen de tiempo que han tenido para presentar a un aspirante alternativo.

La tensión en el seno del PP avilesino crecía ayer hora a hora, en vísperas de la histórica junta local de esta tarde, convocada con 24 horas de antelación, que tendrá que elegir al sustituto de Aréstegui tras su renuncia, el pasado sábado, a la presidencia que ocupó durante 22 años debido a su aparición en el sumario de la vertiente asturiana del "caso Pokémon" como presunto receptor de dádivas por valor de 108.357,43 euros a cargo de la empresa Aquagest. Rodríguez Maniega se puso en contacto por la tarde con casi todos los 32 miembros de la junta local que hoy votarán su elección. La hasta ahora secretaria general del PP en la ciudad les explicó que el proceso se adecua a lo recogido en los estatutos de la formación. Y se mostró abierta a dialogar y colaborar activamente con los miembros del grupo municipal.

Rodríguez Maniega recibió el respaldo de la mayoría de los miembros de la junta. No obstante, varios concejales consideran que su elección es un obstáculo para la regeneración del partido, envuelto en turbulencias desde hace varios meses debido a la presunta vinculación de Aréstegui con el "caso Pokémon", que instruye la juez gijonesa Pilar de Lara desde Lugo. Este sector crítico, minoritario en la junta local, también cree que la imposición de una gestora por parte de la dirección regional abriría las puertas a un cambio profundo a medio plazo, a pesar del enorme desgaste que supondría.

La posibilidad de crear un órgano de estas características se desvaneció en virtud de las conversaciones entre Mercedes Fernández y Aréstegui para propiciar la dimisión del exlíder del partido en Avilés. La presidenta autonómica aceptó que la elección del sustituto se hiciera a través de una junta local, una decisión que pone en bandeja el liderazgo a Rodríguez Maniega, ya que cuenta con el apoyo del núcleo que ha controlado el poder hasta ahora.

Los críticos con la diputada nacional han decidido que no le darán su apoyo esta tarde durante la votación de la junta local, que previsiblemente se hará a mano alzada, de acuerdo a la tradición de este órgano. No obstante, en el caso de que no se presente ningún candidato alternativo, como todo parece indicar, es probable que la elección de la nueva presidenta se ejecute directamente por proclamación.