El Puerto de Avilés busca una mayor operatividad para el futuro y, por ese motivo, se marca como objetivo aumentar el calado del muelle de Raíces -tiene 8 metros de profundidad- ya que ahora no se adapta a las condiciones de los grandes buques, de mayores dimensiones. En el resto de la ría, el calado ronda entre los 12 y los 14 metros. "Ya hemos acabado las grandes obras y hay alguna opción de hacer nuevas inversiones es en esa zona. La tercera fase de la ampliación de la margen derecha -la prolongación de los muelles de Valliniello hasta la factoría de Alcoa- no está descartada, pero en estos momentos no hay necesidad por la cantidad de tráficos que tenemos en Avilés", explicó ayer el presidente de la Autoridad Portuaria, Santiago Rodríguez Vega.
Por el momento, el consejo de administración del Puerto va a contratar los servicios de asistencia técnica para redactar el anteproyecto y la documentación ambiental para las obras de adecuación del muelle de Raíces para nuevos tráficos, con un coste de 95.000 euros. Además del calado, los trabajos incluirán la ampliación de la explanada para igualarla con el resto de muelles de la margen izquierda. "Esas obras no están incluidas en el plan de inversión, pero tenemos que empezar a analizar esta posibilidad de cara al futuro", añadió. Así, el documento deberá explicar las condiciones técnicas de la obra a realizar, un estudio de impacto ambiental -ya que se tendría que acometer un nuevo dragado en la ría-, las dificultades que podría tener y el presupuesto.
El Puerto de Avilés, en los últimos años, ha realizado una importante inversión para adaptarse a las nuevas hechuras de los cargueros y así poder competir con otras instalaciones portuarias del Cantábrico y atraer nuevos tráficos. La última operación para aumentar el calado de la ría de Avilés acabó hace apenas unos días. La draga "Njörd R" llegó al estuario para profundizar hasta 14 metros enfrente de los nuevos muelles de Valliniello. El presupuesto fue de 2,9 millones de euros.
"El muelle de Raíces tiene un calado de 8 metros, de los que menos tienen en el Puerto. El de la ampliación de Raíces llega hasta los 12 metros, por lo que estamos limitados en el tipo de barcos que podemos meter ahí. Ahora, por ejemplo, si tenemos ocupado todo el espacio en la ampliación de Raíces debemos dejar al barco en espera o que atraque en la margen derecha", explicó Rodríguez Vega. El "problema" en la margen izquierda es que además el muelle de San Juan está copado por la actividad de Asturiana de Zinc y sus tráficos de blenda, ácido sulfúrico y cinc, además de los tráficos de clínker (cemento). "Nos queda un muelle precioso, como es el de Raíces, pero limitado por el calado", reconoció Rodríguez Vega.
La margen izquierda del Puerto de Avilés se encuentra con el handicap de unos accesos que no son acordes con una instalación de interés nacional. Las administraciones regional y estatal llevan años "mareando la perdiz" para ejecutar una carretera que conecte los muelles con la autopista. El Principado tiene que redactar el proyecto mientras que el coste de la construcción correría a cargo del Estado. El último capítulo fue la elección de la llamada ronda norte, un trazado que comunica con la autovía a través de las canteras de Mota y que discurre, en su mayoría, por terrenos de Avilés, menos un pequeño tramo que va por Castrillón. Y es esa afección la que llevó al Ayuntamiento castrillonense, que apuesta por un túnel bajo la ría, a poner un recurso contra ese trazado al considerar que no se había contado con su opinión.
Respecto a la margen derecha, la Autoridad Portuaria inició su "conquista" en 2008, con la ejecución de la primera fase de la ampliación. Desde entonces, 62 millones de euros de inversión, dos fases ejecutadas, dragados y obras complementarias.
