"Cervantes equipara a las mujeres en todo al hombre", aseguró ayer el sociólogo, politólogo y escritor Fernando Álvarez Balbuena. "La mujer tiene que ser igual al hombre en todo: no sólo en sus derechos, también en el modo de actuar en sociedad", aseguró el presidente de honor de la Sociedad de Amigos del País y colaborador de LA NUEVA ESPAÑA.

"Las mujeres más importantes en la vida de Cervantes fueron su madre, sus tres hermanas, su mujer y sus amantes... a pesar de sus veleidades siempre tuvo a su esposa una especial devoción", indicó Balbuena. "Estuvieron separados siete años. Cervantes no dejó que ningún juez firmara nada. Dejó que ella dispusiera de los bienes, que pagara...", añadió el escritor en la segunda intervención de la jornada de ayer en el curso "La visión cervantina en el siglo XXI", que esta mañana se clausura en el chalé de La Granda, la sede de los seminarios veraniegos que alcanzan ahora la edición número 38. "Al final se reconciliaron y volvieron a vivir en Madrid", señaló Balbuena. "Las mujeres cervantinas son luminosas en todas las novelas que escribió, pero no sólo en el Quijote", concluyó.