El avilesino Nacho Hurtado vio la nube tóxica desde el centro comercial de La Carriona: "Estaba en El Corte Inglés y vi una nube encima de la ciudad. Al principio pensé que era un incendio", explicó. A José Berdasco le pilló en el parque Ferrera: "Todo duró sobre diez minutos. Estaba en el parque Ferrera y me comenzó a picar la nariz y la garganta, había gente tapada con pañuelos para poder respirar".

Juan Carlos Pérez y Ana Domínguez paseaban su perro por Rivero y cuando se produjo el escape estaban en Cabruñana. "Vimos a mucha gente tosiendo en plena calle, había una niebla y pensamos que era de humo, de un incendio, pero luego supimos que no, que eran gases".

María Fernández y su hijo Marcos Álvarez se quejaban de picor de ojos y garganta. "Íbamos caminando por Rivero y nos encontramos con bastantes personas con la cara tapada y tosiendo ¿Es un escape?", inquirió Fernández, que señaló que también "hubo personas que habían ido a correr al parque Ferrera y terminaron yéndose". Minutos después, en la calle La Fruta, Manuel Fernández dejó clara su postura sobre el escape de ácidos en las baterías de coque: "Nos están envenenando poco a poco y aquí no pasa nada".