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Señales que no llevan a ningún sitio

"Crean confusión a los visitantes", lamentan los vecinos sobre los numerosos indicadores hacia museos, hoteles y negocios cerrados

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Señales sin sentido

Hace un lustro que los hermanos Alfredo y Fernando Campelo decidieron cerrar su museo de música y automóviles históricos Alfercam, en el barrio del Quirinal, pero en el Carbayedo y en la avenida de Los Telares aún se mantienen señales que indican al visitante el camino a seguir para conocer las dos colecciones. Algunos vecinos, como Antonio González Suárez, se sorprenden al verlas. "Por culpa de ellas, creía que seguía abierto. Antes pasaba por delante y veía coches aparcados fuera", comenta este joven. Otros como José Luis García, que visitaron el museo ahora clausurado consideran que "mantener estas señales genera confusión, sobre todo a las personas que vienen de fuera".

Pero el museo Alfercam no es el único caso, ni mucho menos. Las señales de muchos puntos de la comarca hace años que no se renuevan. Así, los visitantes conocen el camino a hoteles clausurados, a empresas que cambiaron de nombre hace décadas y a zonas con más sílabas de las precisas.

En la avenida de Gijón y en la calle de Marqués de Suanzes se mantienen dos que indican el mejor modo de llegar a Inespal y a Aceralia, dos grandes empresas que dejaron de existir como tales a finales de la década de los años noventa. La primera se transformó en Alcoa y la segunda, después de muchos movimientos empresariales, terminó siendo Arcelor-Mittal. Este panel -pocos metros antes de tomar la carretera de Luanco- sufre además el deterioro del paso del tiempo. Y ahí sigue. Las de Marqués de Suanzes se mantienen inalterables.

Las dos multinacionales se las llevó el viento, no así, sin embargo, el área del puerto. En la rotonda del puente Azud, en dirección a la ría de Avilés, hay una señal -que lleva años sin que nadie mire para ella- que habla de "zona porturaria", con una "erre" de más. Esta errata, al menos, no confunde demasiado al conductor. A unos pocos metros se da de bruces con los barcos atracados en el estuario avilesino y descubre que lo "porturario" tiene mucho que ver con lo portuario.

Las que sí que confunden son las señales situadas en la calle Llano Ponte que indican hacia los hoteles Kris Parque Astur y La Posada de Overo. Ambos estaban a orillas del pantano de Trasona. El primero abrió en 2009. Después de un lío en los tribunales su gestión correspondió a la cadena Kris. Pero mantuvieron esta actividad unos pocos meses: los dueños fueron los que tomaron las riendas de un negocio que cerró en diciembre de 2015. Lo que le sucede a La Posada de Overo es menos grave: hace pocas semanas cambió su gestión y, con ella, su nombre. "Sabía del cierre del hotel de Parque Astur, no del cambio del de Overo", indicaba ayer bajo las confusas señales María del Mar Sánchez Reyes junto a su hijo Lucas Carvalho Sánchez. En la misma calle, José Antonio Vallejo comentaba igualmente la suerte que han corrido ambos establecimientos hoteleros.

Otra singularidad de algunas señales de la comarca es su innecesaria reiteración. En el puente Azud, en sólo unos pocos metros, hay dos indicadores repetidos. Ambos explican cómo se va a Luanco, al Centro Niemeyer y a la zona portuaria. Y aquí el conductor no tiene problema. Las metas no se han movido del sitio. Por el momento.

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