Dos empresas han interpuesto sendos contenciosos administrativos: uno contra el Ayuntamiento y el otro, contra la CUOTA. Las dos firmas consideran injusta la decisión de Illas de ordenar el derribo de una caseta de telecomunicaciones instalada en el monte Gorfolí. "La base de nuestra decisión es eminentemente urbanística: la caseta está a menos de tres metros de la caseta de otra empresa y eso incumple las normas urbanísticas", explicó el Alcalde de Illas, Alberto Tirador.
El desacuerdo entre las dos empresas, el Ayuntamiento y la CUOTA se alarga ya desde hace un año. La Consejería de Infraestructuras ordenó ayer la remisión al TSJA. "Nuestra decisión la tomamos a partir de un informe que pedimos al Principado. El problema surgió cuando una tercera empresa afectada denunció interferencias en su servicio", explicó Tirador.
El Gorfolí está lleno de antenas que son propiedad de unas empresas y que explotan otras. "Esta primera denunció el caso en el Ayuntamiento. Lo comprobamos y descubrimos que los retranqueos entre las casetas tenían una distancia inferior de tres metros. Entonces pedimos el informe y con él ordenamos el derribo", confirmó el Alcalde de Illas.
