El colegio público Marcos del Torniello ha sido reconocido por el Ministerio de Educación con el "Sello de Vida Saludable". Recibe este distintivo de calidad por fomentar entre el alumnado hábitos que conducen al desarrollo de comportamientos saludables en todas sus vertientes, tanto de alimentación y ejercicio físico como de protección del medio ambiente, bienestar en las relaciones entre la familia y la escuela o la formación del profesorado.

Del los 225 centros escolares españoles que optaron este año a dicha marca, un total de 41 lo han obtenido, dos de los cuales se encuentran en Asturias: el colegio avilesino y el instituto Luces de Colunga. "Este sello, que no conlleva asignación económica alguna, es el reconocimiento al trabajo que llevamos realizando varios años, tanto los profesores como las familias, que colaboran en cuantas iniciativas proponemos para que el alumnado adquiera hábitos de vida saludable y respetuosos con el medio ambiente", señala Teresa Álvarez Carro, directora del colegio de Educación Infantil y Primaria de la calle Travesía Depuradora.

Entre los programas que desarrolla el Marcos del Torniello y han sido evaluados por el Ministerio de Educación figuran el de desayunos saludables, cuidado de la boca, consumo de fruta en el recreo, patios coeducativos, juegos tradicionales, mindfulness (técnica para favorecer la concentración y la atención plena), reutilización y reciclaje de residuos, o actividades deportivas con las familias.

Desde hace varios cursos, los alumnos de Infantil consumen fruta todos los días en el aula, minutos antes del tiempo de recreo y bajo la supervisión de la profesora. Además de crear un hábito, "aprovechamos este tiempo para contar, diferenciar los colores, detectar texturas o conocer las frutas de cada temporada", señala Teresa Álvarez Carro. Los alumnos de primero y segundo de Primaria continúan con esta rutina, pero de forma más autónoma. "La fruta está en un frutero y acuden a él cuando les apetece", añade la directora del colegio.

La actividad física, por su parte, está centrada en el patio, donde una vez a la semana se promueven recreos sin balones para que la atención no sólo recaiga en el fútbol o baloncesto. Así, se recuperan juegos tradicionales como el cascayo o las cuatros esquinas y también se fomenta el uso de la bicicleta, los patines o el monopatín. El deporte, apunta la directora, se practica con las familias para mejorar la convivencia. "Están muy implicados en el centro, hay una relación muy cercana", asegura Teresa Álvarez.

Asimismo, el Marcos del Torniello está muy sensibilizado con el medio ambiente: reduce residuos, los separa para su reciclaje en los contenedores correspondientes -también tiene una compostadora- y reutiliza los elementos en desuso. Forma parte de la red de escuelas por el reciclaje.