Tania González (Avilés, 1982) asegura notar el cariño de sus compañeros de Podemos en Avilés. Eso le dio ánimos para presentarse, ahora, a dirigir el partido que ayudó a fundar en 2014. Ese año también se convirtió en eurodiputada en el Parlamento Europeo, una experiencia de la que está muy satisfecha.
- ¿Por qué da el paso?
-Me remonto hace cuatro años, cuando muchos compañeros me mostraron su apoyo para presentarme a las primarias para el Europarlamento. Ese cariño y apoyo, junto con la ilusión compartida por impulsar un proyecto que sirva para el cambio, fueron los motores. Hoy muchos compañeros me piden dar el paso para ser secretaria general de Podemos y ese respaldo es fundamental. Tenemos el gran reto de impulsar una candidatura ciudadana en 2019. Y ese reto me ilusiona, quiero trabajar por él y aplicar la experiencia de estos cuatro años en el europarlamento.
- Como secretaria general, ¿qué es lo que quiere mejorar en el partido para acercar a más gente?
-Hay muchos pasos que se han ido dando, como crear un plenario para que pueda haber una participación más directa en los asuntos del grupo municipal. Ése es el camino que tenemos que seguir y es la fórmula organizativa que vamos a tener por estatutos. Pero, sobre todo, creo que lo prioritario es trabajar por un gran reto y quiero aprovechar este proceso para que muchas más personas se acerquen a Podemos, se vuelvan a ilusionar y sean partícipes en la transformación.
- ¿Recuperar el espíritu del 15-M?
-Ese espíritu está en general en Podemos. Hoy nuestra sociedad es diferente a antes del 15-M; somos conscientes de que tenemos capacidad de incidir y de generar transformaciones políticas. Ahora, hay que dar un nuevo impulso, tenemos una gran oportunidad y no la podemos desaprovechar.
- Y aglu tinar en esa gran candidatura a partidos políticos, como IU, ¿cree que será posible la confluencia?
-Lo más importante es que sea una confluencia ciudadana, con los movimientos y abierta a personas, vecinos, asociaciones, colectivos y a fuerzas política. Creo que no tenemos que hablar tanto de la suma de siglas sino del proyecto de transformación social.
- ¿Cree que les puede pesar lo que dicen las encuestas a nivel nacional, que da una pérdida de votos a Podemos?
-Las encuestas no hay que tomárselas al pie de la letra sino con mucha cautela. En anteriores procesos, no acertaron. Hay que trabajar por ese cambio, ilusionar y ese es el proceso que dará un resultado u otro. Creo que en Avilés tenemos buenos mimbres, un deseo mayoritario por parte de la ciudadanía de construir una ciudad con un proyecto de futuro, más dinámica.
- ¿El PSOE, que lleva gobernando años en Avilés, ha sido capaz de ver ese cambio?
-Es un gobierno que no ha sabido actualizarse con los tiempos, que ahora mismo da la sensación de no tener un proyecto de futuro, de no tener dirección, ideas; es como si estuviese en un barco sin brújula. Está llevando a la ciudad a una situación de inmovilismo. Creo que Avilés tiene un potencial enorme y, por eso, tenemos que trabajar con él ya que muchas veces se obvia por parte del gobierno municipal. No está siendo aprovechado para construir un proyecto de futuro, donde mucha más gente pueda desarrollar su proyecto de vida.
- Si es elegida secretaria, ¿ tendría una reunión con el PSOE para intentar acercar planteamientos?
-Si salgo elegida creo que es bueno tener reuniones con las fuerzas políticas y con la gente de Avilés. Es bueno que el grupo municipal tenga su autonomía; los órganos estamos para apoyar las tareas y las acciones, pero creo que en este mandato este grupo seguirá llevando la batuta de la representación municipal.
- ¿Se ve como candidata a la Alcaldía?
-Bueno, paso a paso, ahora estamos en este proceso de primarias, y uno de nuestros retos es impulsar esa gran candidatura. Ese espacio debe ser el que decida quién lo va a liderar. Yo pongo mi trabajo a disposición de esa candidatura para que sea exitosa.
- Aunque salga elegida, no va a dejar su cargo como eurodiputada, ¿cómo han sido estos cuatro años?
-Cuando llegamos al Parlamento, pensábamos que iba a ser una maquinaria burocrática tremenda y, en efecto, lo es. Sin embargo se pueden hacer muchas cosas; creo que hemos conseguido abrir las puertas y ventanas de la institución, que la gente sepa lo que está pasando y hemos sido capaces de trasladar allí los problemas de la ciudadanía. Siempre he mirado a Avilés y he trasladado problemas como el de los intoxicados por mercurio de Azsa, la contaminación del aire...
- ¿Cuáles son los problemas más importante de Avilés?
-Hay un problema de concepto. Creo que la gran potencialidad de Avilés no está siendo explotada para generar empleo, turismo, para potenciar por ejemplo el arte como una de las claves de la ciudad que nos puede distinguir de otras. Abrir la comarca como área metropolitana en vez de competir con otros municipio. Tenemos ejemplos como la ronda norte, que llevamos años sin solución. El otro día, Balbín dio una solución más sencilla, que es soterrar la carretera igual que las vías. Es más adecuada que crear otra barrera estructural más, desaprovechando una buena parte de la zona rural que nos queda. Una potencialidad es un Avilés verde, una industrialización verde, pero también comunicar mejor nuestra zona rural. Tenemos muchos puntos negros en nuestro patrimonio que si fuéramos capaces de ponerlos en valor, la ciudad tendría un atractivo mayor. Y una de las grandes potencialidades es su gente y a veces no se la tiene en cuenta. El PSOE parece que siempre mira hacia fuera porque piensa que es lo mejor.
