Un elefante salvaje entró en la ciudad de Siliguri, en el este de la India, donde sembró el pánico entre los residentes y destrozó decenas de edificios y vehículos, informó a Efe una fuente oficial.

El paquidermo fue avistado sobre las 05.00 hora local (23.30 GMT) y permaneció en la urbe, de más de medio millón de habitantes y situada en el estado de Bengala, hasta que fue apresado por las autoridades unas cuatro horas y media después, dijo el jefe de la Policía local, Manoj Kumar Verma. En una operación que Verma describió como "fluida", se logró apresar al animal, para sedarlo y trasladarlo de nuevo al bosque.

La fuente indicó que no ha habido heridos y estimó que cerca de un centenar de edificios y una veintena de vehículos resultaron parcialmente dañados por el animal, si bien todavía no ha concluido el recuento oficial.

"Quizás se sentía aislado y trataba de buscar una salida, pero había un montón de gente" en el lugar, explicó el jefe policial, quien afirmó que la población entró en "pánico" durante la incursión del elefante.

En el estado vecino de Orissa, once elefantes causaron el pánico a mediados de 2013 al irrumpir en el centro urbano e invadir un estadio deportivo en la ciudad de Rourkela.

La India alberga una población de unos 27.700 elefantes salvajes, en torno a la mitad del total de paquidermos en Asia, mientras que otros 3.500 ejemplares domesticados viven en cautividad. Los elefantes salvajes en la India están desperdigados en una treintena de reservas que ocupan unos 65.000 kilómetros cuadrados, el equivalente a la superficie de Sri Lanka. Más de la mitad de los estados indios tienen paquidermos en libertad y las principales colonias están en el sur y el noreste del país.