Avilés, J. C. G.
El joven piloto castrillonense Adrián Parrondo se sobrepuso a las adversas condiciones meteorológicas y consiguió terminar en una meritoria octava plaza en la carrera que se disputó en la localidad burgalesa de Bureba. La prueba fue puntuable para el campeonato provincial de Burgos.
Las lluvias torrenciales, que a punto estuvieron de suspender la carrera, convirtieron el circuito en un auténtico lodazal. Las aguas empeoraron las condiciones de un circuito ya de por sí arduo y de superficie arcillosa y resbaladiza. Todos esos factores se unieron en contra de Parrondo, que se encontraba por primera vez en su corta carrera con un terreno de tales características.
No obstante, el castrillonense echó mano de su habitual arrojo para evitar las caídas -hasta nueve se dieron a lo largo de la carrera- y situarse desde las primeras vueltas en una cómoda octava plaza que mantendría hasta el final, acreditando, además, muy buenos tiempos intermedios.
Tras su éxito en Bureba, Adrián Parrondo volverá a tierras burgalesas este fin de semana para participar en la prueba de Aranda de Duero.
