Avilés, Vicky FUERTES

El baloncesto gijonés es un referente regional y se volvió a poner de manifiesto en la final alevín femenina de los Juegos Deportivos del Principado, en la que tres de los cuatro colegios finalistas eran de Gijón. El luanquín Colegio de La Vallina fue la única excepción y además compitió a gran nivel al lograr la segunda plaza por detrás del San Vicente de Paúl. La competición se disputó en el polideportivo de Luanco con mucho público que disfrutó del gran nivel que mostraron todos los equipos participantes.

El flamante campeón de Asturias realizó una competición impecable y se impuso en la final a las locales del colegio de La Vallina por un ajustado resultado de 67-73, en un emocionante partido no exento de calidad. «Ha sido una de las mejores finales de los últimos años, donde hemos disfrutado de un buen ambiente de baloncesto», apuntó Guzmán García, entrenador de La Vallina.

En el partido decisivo, las gozoniegas empezaron a buen ritmo y supieron plantar cara en todo momento a las gijonesas, que partían como favoritas indiscutibles. En el primer cuarto el dominio fue para el conjunto que dirige Guzmán García, pero el San Vicente iba recortando distancia y poniéndoselo cada vez más difícil a las de Luanco. Según transcurrían los minutos, los nervios también afloraban en las jugadoras, haciendo que éstas cometieran numerosos errores en forma de pérdidas de balón o faltas innecesarias.

El choque llegó a los últimos instantes totalmente abierto y con un incierto marcador dada la igualdad, lo que hacía imprevisible el predecir que equipo se llevaría el trofeo a casa. El Colegio San Vicente logró controlar mejor los nervios y la tensión en los momentos decisivos y se alzó con el ansiado título regional.

El partido por el tercer y cuarto puesto enfrentó al Colegio de La Inmaculada frente al Codema, imponiéndose este último por 55-50 en otro partido no apto para cardiacos. «Fue un encuentro que se vivió como si se tratara de una final. Hasta el último minuto la igualdad fue total. El Codema consiguió una ligera ventaja que supo conservar haciéndose con el tercer puesto», añadió Guzmán García.

Previo a estos dos partidos, se jugaron las semifinales que enfrentó a La Vallina con el Codema y al colegio de La Inmaculada con el San Vicente. Tanto el San Vicente, a la postre campeón, como La Vallina, subcampeón, afrontaron estos las semifinales dispuestos a demostrar su superioridad en el juego y en el marcador. De esta manera las de Gozón se impusieron al Codema por un cómodo resultado de 72-31 y el San Vicente hizo lo propio con La Inmaculada por 71-37. «En todos los partidos que se han disputado en esta fase final llama la atención lo abultado que han sido los resultados, pues no es habitual en categorías tan pequeñas llegar a conseguir tanteos tan elevados», sostuvo el técnico de La Vallina.

Ahora con la temporada finalizada, los equipos se tomarán unas más que merecidas vacaciones y unos más que otros con la satisfacción de haber hecho muy bien los deberes. La conclusión de la fase final de los Juegos Deportivos es que el futuro del baloncesto femenino asturiano está más que garantizado. Si a la juventud de estas jugadoras se le suma el gran nivel técnico que muchas de ellas atesoran, es lógico deducir que de estos equipos procedentes de los patios de los colegios saldrán las jugadoras que en un futuro no muy lejano militarán en los grandes equipos asturianos del baloncesto en categoría femenina.