La Foz (Morcín),

C. M. BASTEIRO

Morcín se rindió ayer a lo mejor de la gastronomía asturiana en forma de queso. La localidad de La Foz acogió la XXII Feria de los Quesos Artesanos de Asturias y reunió en su mercado a más de 20 artesanos. En total, se pusieron a la venta 2.000 piezas de las que se adquirieron «una buena parte» ya que, según la organización, «los vendedores se fueron contentos». Como cada año, hubo tiempo para todo, cata, muestras, exhibiciones y mucha fiesta. El queso de La Peral se llevó el galardón al «Meyor Quesu 2010 d´Asturies».

La decisión no fue fácil, ya que el jurado tuvo que elegir entre las más de veinte variedades que se presentaron al encuentro gastronómico. Las puestos de venta se abrieron a primera hora de la mañana y los compradores se fueron animando poco a poco. Mari Medio, de Villaviciosa, rogaba desde su puesto, lleno de quesos de Los Caserinos, que el tiempo mejorara «porque si no la gente no se anima a venir», explicó.

Con orbayu y sin él, la carpa comenzó a llenarse a mediodía. Otra vendedora, Marigel Álvarez, la única asturiana que produce y vende queso casín, señaló que las ventas estaban al nivel de anteriores ediciones y que la hora punta «siempre es más allá de la una de la tarde».

Justo a esa hora, después de una concurso de cata, en el que participaron comensales de dentro y fuera del concejo, y una misa en honor de la Virgen de La Probe, se produjo el izado de banderas de Morcín y Sobrescobio, para llevar a cabo el hermanamiento del municipio organizador con el «Pueblo Ejemplar» de 2009. José Sariego, director de la Feria y miembro de la Hermandad de La Probe, explicó que «lo hacemos desde hace años, queremos que todos los Pueblos Ejemplares de Asturias sean bien recibidos en el concejo de Morcín».

Para ayudar en la bienvenida, Rafael Secades, miembro de la Cofradía de los Amigos de los Quesos de Asturias, pronunció un emotivo pregón en el que alabó las virtudes de las viandas asturianas y su desarrollo a lo largo de los años. Después de comer, se entregó el premio al mejor queso 2010, que este año recayó en La Peral. A última hora de la tarde se inició la romería a cargo de la orquesta «Imperial».

De esta forma, la música puso el punto final a un encuentro que,poco a poco, se ha convertido en todo un referente de la gastronomía artesanal de la región. El consejero de Medio Rural y Pesca, Aurelio Martín, no quiso perderse su cita con los productores asturianos y explicó la «importancia» de valorar los manjares de la tierra. Además, recordó que el Principado «trabaja duro» para promocionar los quesos dentro y fuera de la comunidad. Asimismo, el alcalde del municipio, Jesús Barbao, alabó la organización del encuentro «que sigue sumando adeptos» e hizo hincapié en la necesidad de desbloquear los fondos de la Montaña Central destinados al turismo «para poner en marcha el Museo de la Lechería».

Cuando se cerró la feria, llegó la hora de hacer recuento. La organización consideró como «positivo» el balance de ventas de este año y cifró en más de 3.000 el número de visitantes que se acercaron a La Foz de Morcín para poder disfrutar de los mejores quesos asturianos. Seguro que se fueron a casa con buen sabor de boca.