Los vecinos de Campomanes están cansados "del polvo y los daños" que genera el paso de vehículos pesados por la localidad lenense camino de las obras de la variante ferroviaria de Pajares. La asociación de vecinos ha enviado un nuevo escrito al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) en el que amenazan con movilizaciones si no encuentran respuesta a sus reivindicaciones.
El pasado mes de mayo, vecinos de Campomanes y responsables del Adif mantuvieron un encuentro. En la reunión, los representantes vecinales denunciaron "la suciedad y el agrietamiento" que sufría la travesía de Campomanes "debido al paso de los camiones de la obra". Pedían el asfaltado de la carretera que había deteriorado, a su juicio, la maquinaria.
El Adif se comprometió a contestar en quince días, pero la réplica llegó el 11 de julio. En el documento, los responsables del organismo señalaban que los daños en las aceras se deben a "furgonetas de reparto". Además, también señalaban que "hay que tener en cuenta que en el valle del Huerna también existen zonas residenciales y otras actividades económicas".
Esta respuesta fue la gota que colmó el vaso. En el nuevo escrito remitido por la asociación vecinal al Adif se afirma que "en el último censo de Lena constan 514 vecinos en la zona que quedan reducidos al cincuenta por ciento en invierno, no más de cien vehículos y no hay ningún camión de más de cinco toneladas entre ellos". Además, añaden que "no sabemos si las actividades empresariales a las que se refieren se generan en Friovivo, una nave abandonada que no puede reabrir sus puertas a causa de la situación del entorno". "También pueden referirse a los establecimientos hoteleros que tuvieron que cerrar sus puertas por falta de clientes", destaca el colectivo en el escrito.
Los vecinos esperan que esta carta sea suficiente para "cambiar los argumentos expuestos hasta ahora por el Adif, que plantea unas alegaciones, cuanto menos, mal calculadas". Además, también recuerdan que "la normativa de cómo deben de salir las ruedas de los camiones de las obras antes de pasar por una vía pública también está muy clara".
La localidad de Campomanes, además, se considera "discriminada". Según la opinión vecinal, otros pueblos del entorno han recibido "un trato mucho más amable por parte del Adif". Los vecinos de Campomanes quieren el asfaltado del tramo más afectado por la obra, de dos kilómetros, y una reforma en las aceras. También reclaman "una mano de pintura" para las fachadas más cercanas a la carretera.
